Una nueva era para los freelancers: buscan crear el Monotributo Digital en Argentina
La Cámara de Diputados está considerando un innovador proyecto de ley que busca formalizar a los trabajadores digitales independientes, un sector en pleno auge en Argentina.
La diputada mendocina Lourdes Arrieta impulsa la creación del Monotributo Digital Autónomo, un nuevo régimen diseñado específicamente para quienes generan ingresos a través de plataformas digitales y redes sociales.
Formalización de trabajadores digitales
El objetivo principal de esta iniciativa es regularizar la actividad de freelancers y creadores de contenido, quienes actualmente operan en un contexto de informalidad.
Este régimen permitirá a los trabajadores obtener beneficios como cobertura previsional, aportes jubilatorios y acceso a servicios de salud, sin perder la flexibilidad que caracteriza su labor.
El proyecto busca modernizar el sistema tributario argentino y adaptarlo a las nuevas modalidades laborales que están surgiendo rápidamente en el país.
Reconocimiento a nuevas formas de trabajo
Según Arrieta, “miles de personas generan ingresos a través de plataformas tecnológicas sin ningún tipo de respaldo legal”, justificando así la necesidad de esta normativa. Algunas de las actividades incluidas son:
- Teletrabajo independiente
- Producción de contenidos digitales
- Exportación de servicios tecnológicos
- Asistencia a servicios de aplicaciones como Uber, Rappi o PedidosYa
La propuesta busca dar un marco legal a los freelancers y repartidores bajo el régimen de Monotributo Digital.
Además de las mejoras fiscales y previsionales, la propuesta aboga por garantizar una mayor transparencia algorítmica en las plataformas, buscando una relación más equilibrada entre las empresas tecnológicas y sus trabajadores.
El Monotributo Digital Autónomo se contempla como una herramienta clave para la formalización y un estímulo a la competitividad del sector, especialmente con la inminente discusión sobre una reforma laboral que el Gobierno planea presentar ante el Congreso.
Ya ha comenzado el debate en distintos sectores, reconociendo que la economía digital representa un desafío y una oportunidad para los marcos regulatorios tradicionales.
