La realidad es que a 205 días de ocurrido el panorama no cambió en casi nada, lamentablemente. Pero tampoco empeoró, detalle nunca menor.
Sergio sigue con los ojos abiertos respirando por sus propios medios y se encuentra en una habitación de poco más de 12 metros cuadrados,sin televisión ni radio, sólo hay una silla para quienes lo visitan que por lo general son su hermano Carlos, quien vive a 6 cuadras del lugar, y sus hijos Federico y Victoria ya que el resto de la familia vive lejos.
Por parte de los fans están pendientes de alguna nueva información oficial de parte del centro o de algún familiar. La última vez que la prensa se contactó con el hermano del cantante su mensaje fue categórico «sin novedades, está igual que hace tiempo atrás».