Nuevos estudios indican que esconder la IP con apps dudosas es peor que no hacerlo
La seguridad informática es una preocupación que acecha a cada vez más gente en Argentina. Semana tras semana llegan noticias de hackeos, robos de identidad y engaños de todo tipo a través de internet. Por eso muchos usuarios eligen utilizar una VPN -Virtual Private Network por sus siglas en inglés- para esconder su IP y así mantener su privacidad online.
Como en todos los mercados competitivos, existe una gran variedad de proveedores de VPNs, algunos de ellos gratis y otros de pago. Los primeros promocionan sus servicios anunciando que la única desventaja es la publicidad, pero esto podría no ser cierto en todos los casos.
Se ha demostrado recientemente que la gran mayoría de las empresas que no cobran por permitir a los usuarios utilizar un VPN, podrían estar utilizando los datos que dicen proteger para sus propios fines comerciales. Esto por supuesto es una estafa que cae, como tantas otras, en la zona gris y desregulada del mundo de internet.
En algunos casos se trata simplemente de un mal servicio en el que los proveedores fallan en esconder los datos, alojándolos en servidores públicos o de muy fácil acceso. Pero otras empresas venden paquetes de datos a terceros que pueden utilizarlos para hacer publicidad orientada o fines mucho peores, como robos o extorsiones. Estas compañías maliciosas ofrecen el servicio tanto para celulares como para computadoras, por lo que nadie está a salvo con VPN gratuitas.
En definitiva, la única opción viable para utilizar una red virtual privada sin correr ningún riesgo es pagar una cuota mensual. La web experta en sistemas de seguridad VPN Paradise ha compilado un listado con las mejores VPN para navegar en Argentina donde se comparan las opciones según el precio y la calidad general del servicio, orientado tanto al público general como a profesionales.
También se reseñan cada una de las webs de acuerdo a factores como métodos de pago disponibles, dispositivos donde pueden ser usados, la velocidad de transmisión de datos y sus protocolos de seguridad.
Funcionamiento y usos de las VPN
Las redes privadas se utilizan para esconder la identidad del usuario durante la navegación. Esto se logra al conectarse con servidores que están en distintas partes del mundo. Por eso es tan importante elegir proveedores que permitan declarar la dirección IP en muchos países, y así poder disfrutar contenidos internacionales.
El procedimiento básico que realizan estos programas es crear una conexión entre el dispositivo donde se instaló la VPN y una red en el extranjero. De este modo el celular o la computadora toma el IP del servidor y esconde la verdadera identidad y origen de la conexión.
Si bien las redes privadas virtuales nacieron ante la preocupación de los expertos en seguridad por esconder y proteger sus datos e identidades, los usos que se les asignan hoy en día superan ampliamente al de ser simples protectores de datos.
En ciertos ámbitos laborales las empresas la brindan servicios de VPN a sus empleados para que puedan acceder a los servidores desde cualquier parte del mundo,. De esta manera consiguen una dinámica de trabajo más fluida y segura sin depender de restricciones físicas, como sería tener a todos los trabajadores en un mismo espacio.
En la actualidad, sin embargo, el mayor porcentaje de tráfico de datos que pasa por redes virtuales privadas no proviene de ámbitos laborales ni profesionales. Los VPN se utilizan principalmente para acceder a contenido con bloqueos regionales.
Es muy común que usuarios de internet sin mucho conocimiento sobre informática ni redes instalen estos programas para acceder a plataformas de contenido multimedia. Algunas de ellas, como Netflix, habilitan ciertos contenidos según la región y bloquean otros, haciéndolos entrar y salir de circulación según la demanda y estudios de mercado. Así, es posible que una serie o película que esté muy de moda no se pueda ver desde Argentina.
Pero otras plataformas como Amazon o Hulu directamente no permiten registrarse desde países de Latinoamérica, ya que todavía no desembarcaron en la región. En ambos casos los usuarios buscan esquivar las limitaciones a través de VPNs.
Justamente este público es el más propenso a caer en el engaño de las VPN gratuitas ya sea por desinformación o porque el hecho de que estar pagando la suscripción a las plataformas digitales los hace pensar que no vale la pena pagar aún más por la seguridad de un programa de este tipo.
Pero los usos de las VPN no se agotan en estos ejemplos. Como comenta una noticia aparecida recientemente en Infobae, su uso crece día a día en países donde el acceso a internet está limitado, con contenido prohibido o bien con persecuciones a quienes publican cierto tipo de información.
En estos casos, la necesidad de esconder la identidad cobra una relevancia aún mayor. Por eso nunca se debe confiar en las VPN gratuitas, y es mejor pagar por un servicio que brinde tranquilidad y calidad.