Has planeado tu newsletter y, junto con tu equipo de trabajo, diseñaste el contenido perfecto para mantener el interés de tus clientes; pero, al final, ese correo tan bien pensado y visualmente estético se ha perdido en la carpeta de correos basura del destinatario ¿Te suena familiar? ¿Has estado esperando feedback de tu campaña en vano? El hecho de que un correo sea filtrado como spam es la pesadilla recurrente de los empresarios y emprendedores del internet, en especial porque creen estar haciendo todo bien.
Sabemos que un correo que pasa desapercibido es una oportunidad perdida para lograr el engagement del prospecto o cliente con tu marca; por suerte, hay mejores maneras en las que puedes dar curso a tu estrategia de email marketing y en este post te contamos cuáles son los errores más comunes que podrías estar cometiendo, a fin de que puedas aprender cómo mandar mails masivos sin ser spam ¡No te lo pierdas!
¿Sabes qué es un correo spam?
Muchos dueños de pymes se topan con este problema o usan el término sin tener verdadero conocimiento de lo que implica. Y es que, a diario, llegan decenas de mensajes a tu cuenta de correo y la mayoría de ellos los ignoras, porque son del tipo “Oferta, Oferta, Oferta” o “Aprovecha la promoción 2×1” ¿Te ha pasado? Estamos seguros de que así es y, del mismo modo en que representa una molestia para ti, también lo es para tus prospectos, por eso debes familiarizarte con las formas honestas de hacer email marketing, a fin de que ni tu negocio ni la respetabilidad de tu marca se vean afectados.
La palabra “spam” es un anglicismo que nació en la década de los noventa y que ha sido utilizado cada vez con más frecuencia. Hace referencia a los mensajes no solicitados o que no tienen ninguna utilidad, principalmente del tipo publicitario, y que se envían de manera masiva, es decir, a cientos o miles de destinatarios a la vez. Además, esta terminología también abarca las comunicaciones fraudulentas o maliciosas, que contienen algún virus o que se envían con el propósito de robar los datos personales.
¿Por qué tus correos acaban en la bandeja de spam?
El email marketing, como parte de una campaña digital para la captación de clientes, es una de las estrategias más efectivas y rentables que puedes implementar; sin embargo, esto no significa que sea fácil o que puedas empezar a enviar correos a diestra y siniestra, sin un plan preconcebido o una idea bien formulada, porque con ello estarías corriendo el riesgo de que tus mensajes acaben en la lista negra de los destinatarios.
Son muchas las razones por las que tus correos puede acabar en la bandeja de spam, sobre todo cuando no logran superar los filtros impuestos por los proveedores de servicios de internet. Estos softwares contienen algoritmos diseñados con el fin de establecer, a través de una serie de criterios, si un mensaje de correo electrónico es valioso e importante o podría ser pernicioso que el dueño de la cuenta lo abra e interactúe con el remitente.
Plataformas con Gmail o Hotmail tienen filtros muy potentes que evitan que correos enviados con bases de datos robadas lleguen a tu bandeja de entrada o a la de tus clientes; además, estas grandes empresas tienen en cuenta factores muy relevantes, pero que, quizá, a ti te han parecido nimios, tales como el envío de mensajes desde un dominio propio o usando una cuenta de correo con el dominio de la plataforma, la reputación de tu IP e incluso la calidad del texto y la estructura general del mensaje.
¿Qué estás haciendo mal y cómo puedes evitar caer en el spam?
Entonces, ¿qué hacer para que tus correos generen una respuesta favorable y nunca más caigan en esa olvidada y triste bandeja de mensajes basura? En este apartado te contamos algunos de los fallos más comunes que podrías estar cometiendo y que debes evitar a toda costa si quieres que tu campaña de mailing sea todo un éxito ¡Sigue leyendo!
1. Enviar correos sin los permisos correctos. Si has estado enviando ofertas, newsletter u otro tipo de información por correo y de manera periódica, sin un consentimiento previo por parte del destinatario, no solo corres el riesgo de ser víctima de una penalización, sino que también podrías estar cometiendo un delito. En algunos países, el envío de correspondencia masiva sin el consentimiento del receptor podría causarte problemas legales que tendrías que pagar con varios cientos de euros, en caso de que la persona o la empresa ponga la denuncia.
2. Ignorar las leyes. Puede que te parezca bien hablar de tu producto o servicio, pero, antes de enviar correos masivos, piensa de qué manera lo haces, porque, si no, eso te llevaría al punto anterior. Te recomendamos que estudies con cuidado la regulación de las campañas de email marketing de tu país, ya que esto te dará una guía de lo que tienes permitido hacer y lo que sería mejor evitar.
3. Usar un dominio ajeno. Si estás emprendiendo y quieres incorporar una campaña de mailing a tu estrategia de marketing digital, procura invertir algo de dinero en la implementación de un dominio propio para el envío de correos ¿Por qué? Pues, si utilizas una cuenta genérica, como aquellas con terminación en Gmail.com o Hotmail.com, es probable que los filtros de tu destinatario marquen tu mensaje como no deseado. Recuerda que las cuentas de email gratuitas no han sido pensadas para la gestión de un negocio y no te confieren la imagen de marca que deseas.
4. Listas de contactos compradas o robadas. Contar con una buena base de datos toma tiempo, pero, si te esfuerzas, verás resultados positivos a largo plazo. Recuerda siempre que todo lo que se hace de manera deshonesta tiene una consecuencia, así que, si quieres que tu marca tenga éxito, tómate tu tiempo para contactar a tus prospectos y construir una relación sólida con ellos ¡Por nada del mundo recurras a la compra o el hurto de listas de contactos!
5. Engancha a tus contactos. Puede que estés haciendo todo bien y que cumplas con los pasos anteriores, pero, si tu newsletter es aburrido y tu email no tiene un buen diseño, es probable que te marquen como spam. Recuerda que el contenido es el rey del internet, así que sácale todo el provecho posible y escribe textos entretenidos, fáciles de leer, que aporten algo útil a tus suscriptores. Sabemos que la verdad puede ser dolorosa, pero, si tus mensajes están cayendo en la bandeja de spam, es posible que tus emails no sean relevantes, que utilices un vocabulario demasiado comercial, que no estés incluyendo un enlace para cancelar la suscripción o que la frecuencia del envío de tus correos sea excesiva y estés saturando la bandeja de tus clientes.
¿Te han resultado útiles estos consejos? No olvides ponerlos en práctica para que puedas llevar tu estrategia de mailing y tu negocio online al siguiente nivel ¡Suerte!