Ciclo Cultural en el Palacio Barolo: Literatura y Masonería se Encuentran
El emblemático Palacio Barolo, un símbolo de Buenos Aires, abre sus puertas para un ciclo cultural que une la literatura con la masonería, revelando los secretos y mensajes ocultos en las obras de grandes autores.
El Palacio Barolo no solo es un ícono de la arquitectura porteña, sino también un espacio cargado de significados masónicos. Desde su creación, la masonería ha estado conectada con la literatura y el simbolismo, utilizando un lenguaje lleno de metáforas y enseñanzas que nutren la creatividad literaria.

Visitar el Palacio, con acceso por Avenida de Mayo y Hipótilo Yrigouen, es una oportunidad única para comprender la influencia de La Divina Comedia en su arquitectura. El edificio alberga un ciclo cultural donde se entrelazan la literatura, la masonería y la arquitectura, desvelando el significado oculto detrás de las palabras y las estructuras. Bajo la guía de Brenda Algozino y Sebastián Sfriso, Subsecretario de Cultura de la Gran Logia de Argentina, se invita a explorar las obras de Oscar Wilde, Antoine de Saint-Exupéry y Jorge Luis Borges, quienes abordaron temas humanos, espirituales y del conocimiento a través de su trabajo, resonando con la esencia masónica.
El Legado Masónico del Barolo
Más de un siglo después de su inauguración, el Barolo sigue siendo un referente para la comunidad masónica, no solo por su simbólica arquitectura, sino también por su papel como espacio de diálogo cultural. Este reciento se presenta como un puente entre la tradición y la modernidad, donde la masonería se transforma en un legado vivo y accesible.

Ya se llevó a cabo la charla sobre Oscar Wilde; el próximo evento está programado para el domingo 2 de noviembre a las 18, donde se explorarán los temas de fraternidad presentes en la obra de Saint-Exupéry. Posteriormente, el domingo 7 de diciembre a las 18, se reflexionará sobre Jorge Luis Borges y sus laberintos literarios en conexión con la tradición masónica.

Además, se ofrecen visitas guiadas diurnas y nocturnas. Las diurnas, a través de Palacio Barolo Tours, exploran las secciones de La Divina Comedia, desde el Infierno hasta el Paraíso. También hay visitas nocturnas que incluyen el encendido del faro del edificio y música en vivo. Paralelamente, el Salón 1923 ofrece un menú diseñado por el chef Joaquín Grimaldi, disponible todos los días, sin necesidad de reserva.
