Durante la pandemia del coronavirus, los ciberataques han reportado un creciente incremento. En todo el mundo, pequeñas y grandes empresas han afrontado el robo de información personal y la posterior exigencia de un pago, lo que se conoce como rescate. A esta modalidad de ataque se le conoce como ransomware.
A raíz de ello, han aumentado los gastos en ciberseguridad. Por supuesto, la prevención es fundamental para reducir los riesgos de ser el blanco de un ciberdelincuente. “Cualquier empresa es susceptible del robo de información. No obstante, es necesario adoptar las máximas medidas de seguridad, tales como usar proveedores de confianza o hacer un control de seguridad. Igualmente, acciones como encriptar los sitios web con SSL, usar información de acceso segura y mantener los programas actualizados son indispensables”, aclara el sitio web Comparahosting.
Los ciberataques se van perfeccionando con el tiempo, por lo que la investigación y los avances tecnológicos son necesarios para hacer frente a estas amenazas. Es esencial conocerlas a fondo y saber diferenciarlas. Las consecuencias de un ataque cibernético son nefastas para cualquier organización, tanto interna como externamente. A continuación presentamos los más comunes:
- Spyware. Este malware busca infectar un ordenador para recopilar toda la información que se encuentra en él. Una vez que lo logra, transmite los datos a una entidad externa. Los hackers usan la información para lucrar con su venta. Debido a la gran y a la vez sensible información confidencial que almacenan las empresas hoy en día, se trata de un tipo de virus muy nocivo.
- Phishing. Es un tipo de ataque que se expande vía correo electrónico, por lo que su difusión es muy rápida. El objetivo de los ciberdelincuentes es apropiarse de la información de las empresas o personas. Muchas veces basta con abrir el mensaje para que el ordenador o dispositivo se infecte sin darnos cuenta.
- Ransomware. Es un tipo de ciberataque cada vez más común. A través de este, se bloquea el sistema de una empresa o institución. Para desbloquearlo, se solicita un rescate, una considerable suma de dinero. La empresa queda paralizada, lo cual genera un revuelo mediático. Bancos, empresas de telefonía y hasta instituciones gubernamentales han sido víctimas de ransomware.
- Adware. Es un software utilizado para mostrar al usuario publicidad engañosa o no deseada. La publicidad abusiva también puede afectar a las empresas. A través de estos se obtiene información de los internautas. Es necesario realizar una limpieza del navegador y el uso de antivirus para contrarrestar este software.
- Gusanos. Junto a los troyanos, los gusanos son los ataques más comunes en la red. Estos virus se replican en el equipo y se expanden rápidamente en las unidades de almacenamiento. Desde su aparición en 1988, se han perfeccionado hasta pasar desapercibidos para el usuario. Algunos pueden resolverse con una limpieza de la PC, pero otros pueden resultar bastante perjudiciales. Es necesario mantener los escudos actualizados para proteger los equipos.