Los problemas serios de salud asociados con fumar cigarrillos han sido ampliamente documentados por muchos años, pero ahora un nuevo estudio ha proporcionado pruebas fotográficas impactantes de los efectos devastadores que la adicción puede tener en la cara de una persona. Los investigadores entrevistaron a más de 70 pares de gemelos donde uno fuma y el otro no, y encontraron que los fumadores mostraron más signos de envejecimiento prematuro facial. El impacto más significativo estuvo en el dos tercios inferiores de la cara de una persona a la cual fumar le ha causado una mayor formación de arrugas en los labios y papada caída. Los investigadores asistieron al Festival Anual Días de Mellizos en Twinsburg, Ohio (EEUU), y entrevistaron a 79 pares de gemelos idénticos para el informe, que ha sido publicado en el último número de la revista Cirugía Plástica y Reconstructiva. Los resultados también encontraron diferencias significativas en el envejecimiento facial entre gemelos con diferencia de tan sólo cinco años de historia de tabaquismo. Los investigadores identificaron a los pares de gemelos idénticos que diferían en el tabaquismo. En cada pareja, uno de los gemelos fumaba y el otro no, o uno había fumado por lo menos cinco años más que su hermano. Cincuenta y siete de los 79 pares de gemelos estudiados eran mujeres y la edad promedio fue de 48 años. Un fotógrafo profesional tomó imágenes estandarizadas: un primer plano de la cara de cada mellizo. Los gemelos también completaron cuestionarios sobre su historial médico y estilo de vida. Sin conocer los antecedentes de tabaquismo de los hermanos, luego cirujanos plásticos analizaron los rasgos faciales de los gemelos, clasificando arrugas y otras características relacionadas con la edad. Las puntuaciones en varias medidas de envejecimiento facial eran significativamente peores para los fumadores: tenían más flacidez de los párpados superiores, así como más bolsas de los párpados inferiores y debajo de los ojos. Los gemelos que fumaban también tenían puntuaciones más altas en las arrugas faciales, como los pliegues nasolabiales (líneas más marcadas entre la nariz y la boca), arrugas de los labios superior e inferior y flacidez en la mandíbula. «Fumar reduce el oxígeno a la piel, lo que también disminuye la circulación de la sangre, y esto puede dar como resultado una piel degradada, arrugada, y con un aspecto envejecido», explica el Doctor Bahman Guyuron, cirujano plástico en Cleveland y autor principal del estudio. La mayor parte de las diferencias relacionadas con el tabaco afectó a los tercios medio e inferior de la cara. Hubo menos diferencias en el envejecimiento de la parte superior de la cara, como las líneas de la frente o «patas de gallo» alrededor de los ojos. El informe también advierte a los fumadores que no importa cuánto tiempo han sido adictos al hábito, dejarlo o reducirlo ahora puede hacer una gran diferencia en todos los aspectos de la salud de una persona, incluidos los daños en la piel de la cara. Fuente: http://www.dailymail.co.uk/news/article-2480695/We-know-smoking-bad-health-pictures-PROVE-bad-looks-Compare-twin-smokes-doesnt-dont-believe-us.html
Fotos reveladoras: así se ve un gemelo que fuma y otro que no
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