En una entrevista exclusiva con Canal E, Luis Galli compartió su visión sobre cómo el reciente panorama electoral ha influido en el consumo en Argentina. Según Galli, el comportamiento del consumidor ha cambiado drásticamente desde principios de año, con una notable caída en la actividad a partir de mayo.

Aumento en la Inestabilidad Económica

Galli explicó que, tras un periodo de recuperación hasta abril, el consumo se vio afectado por la inestabilidad económica, acentuada por la incertidumbre en torno al dólar y las tasas de interés. “Desde mayo, hemos notado una desaceleración que se extendió hasta el 27 de octubre”, detalló el ejecutivo.

Perspectivas de Recuperación en el Nuevo Contexto Político

Con la conformación de un nuevo gobierno, las expectativas cambian. Galli enfatiza que este nuevo escenario podría ofrecer oportunidades para reactivar el consumo: “La consolidación del entorno político podría facilitar la recuperación de la actividad económica”, afirmó.

El Poder del Consumidor en el Mercado

Un aspecto crítico que Galli resaltó es el cambio en las dinámicas del mercado: “Hoy el consumidor tiene el control total. Define cuánto compra, a quién y a qué precio”. Esto marca un quiebre con el pasado, donde las empresas dictaban las reglas.

Factores que Impulsan el Consumo

Para comprender el movimiento del consumo actual, Galli identificó tres elementos fundamentales. En primer lugar, el poder adquisitivo, que se ve afectado por los aumentos salariales y la disminución de precios. También, la tasa de interés, que influye en las compras, ya que muchos consumidores optan por financiar sus adquisiciones. Por último, las expectativas y el ánimo social son cruciales: si la gente tiene buenas perspectivas, se sentirá motivada a consumir; en cambio, si percibe inseguridad laboral, tenderá a retraerse.

Galli concluyó resaltando la importancia del rol de los grupos empresariales locales: “Es fundamental que los actores argentinos desempeñen un papel protagónico en este proceso”.