El jefe de Gobierno porteño dio una conferencia de prensa para referirse al fallecimiento de Alberto Nisman. Evitó pronunciarse acerca de si se trató de un crimen o un suicidio, pero advirtió: «¿Cómo puede ser que la violencia esté ganando de vuelta la vida pública argentina?»
La muerte del fiscal Alberto Nisman sacudió a la política argentina y la sociedad en su conjunto. En sus primeras declaraciones oficiales tras el hecho, Mauricio Macri reclamó un rápido esclarecimiento: «Hoy es importante que la Justicia actúe en forma independiente, rápida y contundente para decirnos qué pasó con la muerte del fiscal».
«Pasé una noche de aturdimiento. Primero del shock al aturdimiento y después a la bronca. Me dije: ‘¿Cómo puede ser que la violencia esté ganando de vuelta la vida pública argentina?'», señaló en la conferencia de prensa que dio minutos antes del mediodía en la sede de la jefatura de Gobierno porteño.
En momentos en que el oficialismo ya sugiere que se trató de un suicidio y la oposición especula con que podría haber sido un asesinato, el líder del PRO prefirió no tomar partido: «Comparto esta sensación de angustia, impotencia y bronca, pero la verdad es que si criticamos la falta de comportamiento institucional que se ha tenido en todos estos años, malo sería ponernos en el lugar de entorpecer el rol de la Justicia».
«Si esta muerte termina en más impunidad, es un desastre para el futuro institucional de nuestro país», sentenció.
Además, el jefe de Gobierno porteño adelantó que el bloque del PRO en Diputados y el Senado impulsará que se mantenga el equipo que Nisman utilizaba para investigar el mayor atentado terrorista de la historia argentina bajo la conducción de un nuevo fiscal.
Por último, Macri reclamó que la muerte de Nisman sea «un hecho bisagra en la historia de nuestro país». «No puede ser que la Argentina hoy sea an ,noticia mundial porque apareció muerto el fiscal que denunció a la Presidente de la República», concluyó.