El canciller Héctor Timerman citó hoy a los embajadores de los Estados Unidos, Noah Mamet y del Estado de Israel, Dorit Shavit, para hacerles entrega de sendas notas dirigidas al secretario de Estado de Estados Unidos de América, John Kerry, y al ministro de Relaciones Exteriores del Estado de Israel, Avigdor Lieberman, informó el Palacio San Martín mediante un comunicado. Poco antes de mediodía, al leer las cartas enviadas ante la prensa citada en la Sala de Conferencias de Casa de Gobierno, Timerman recordó que se reitera así «lo que hemos solicitado el mismo día en que se hicieron públicas las negociaciones por la cuestión nuclear». Además, informó además que «nos oponemos, por principios políticos y morales, a cualquier acto que promueva la violencia o la violación de la soberanía,.. Argentina se ve en la necesidad de reiterar que nuestro territorio no sea utilizado para fines de intereses geopolíticos y militares de terceros países». En el marco de la reiteración del pedido para que «el tema de la AMIA sea incluido en las negociaciones con la República Islámica de Irán», recordó que el atentado ocurrido hace casi 21 años costó la vida de 85 personas. «La Argentina observa con suma preocupación la creciente frecuencia con que muchos países son utilizados como escenarios en los que otros Estados intervienen para definir disputas en función de sus propios intereses geopolíticos. También nos preocupa ver cómo se utilizan mecanismos de propaganda abierta o encubierta para tales fines. Mi país rechaza tales actos y pretende que no sucedan en su territorio», señaló la carta. Y advirtió que: «en varias oportunidades hemos expresado que la Argentina no tiene ningún interés estratégico, ni militar ni de inteligencia y menos de espionaje en la zona de Medio Oriente. Nos oponemos, por principios políticos y morales a cualquier acto que promueva la violencia o la violación de la soberanía tanto en forma abierta como en forma encubierta. Argentina se ve en la necesidad de reiterar que nuestro territorio no sea utilizado para fines de intereses geopolíticos y militares de terceros países». «El pueblo argentino no tiene que tolerar, y mucho menos sufrir, que su país sea un teatro de operaciones políticas, de inteligencia, o peor aún, de hechos y acciones más graves, por conflictos que le son completamente ajenos a su historia, a su idiosincrasia y a sus costumbres», agregó. En otro párrafo Timerman señaló que «seguiremos confiando en el Poder Judicial de Argentina, responsable de su esclarecimiento en virtud de la división de poderes», aunque resaltó que «aún no ha logrado detener, juzgar ni condenar a los perpetradores de tan aterrador hecho». Timerman también recordó el primer atentado del terrorismo internacional sufrido en Argentina con la explosión de la Embajada de Israel, en marzo de 1992, al señalar que «la responsabilidad de la investigación, por las leyes diplomáticas vigentes, es de la Corte Suprema de Justicia, la cual hace años que no informa sobre ninguna actuación o avance en la investigación». Del mismo modo, el canciller aludió al terrorismo de Estado, entre 1976 y 1983, donde «miles de argentinos fueron «perseguidos, torturados, asesinados y desaparecidos». «Aún hoy desconocemos el paradero de 400 niños nacidos en cautiverio y apropiados por los dictadores y sus secuaces», recordó al destacar que «sin embargo, no hubo un sólo caso de venganza». «Ningún represor murió en Argentina ni en otro país porque explotó una bomba debajo de su automóvil o por un misil dirigido a su domicilio o por la intervención militar, decididas cualquiera de estas acciones por el Estado», planteó el texto que recordó que la Argentina «ha sido, y seguirá siendo una tierra de redención para millones de personas que fueron perseguidas en sus países de origen». El canciller solicitó, también, que «el personal diplomático acreditado en nuestro país observe las normas y conductas estipuladas por la Convención de Viena o el derecho local en los casos
Timerman reiteró en una carta a EE.UU. e Israel que sea incluido el atentado de la AMIA en las negociaciones con Irán
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