Venezuela: El dólar oficial a 6 bolívares, el paralelo a 200

Los venezolanos, que llevan meses formados en largas filas para poder ingresar en los supermercados, padecen la peor escasez provocada por el colapso del modelo populista delchavismo. A esto se suma que el gobierno no autoriza la importación de productos. Berenice Gómez habló con Eduardo Serenellini acerca de la realidad política en Venezuela. “Seguimos con un problema de desabastecimiento brutal. No se consiguen productos de primera necesidad. Para comprar en un supermercado la gente debe hacer una cola muy grande y muchas veces, los clientes son robados en las colas y le quitan lo comprado. No se puede ir con niños porque sino los llevan presos. Las colas en los supermercados llegan a dos cuadras, donde la gente pasa más de 8 horas para llevar alimento a su casa”, explicó la periodista. “En relación al tipo de cambio, el dólar oficial tiene un valor de 6 bolívares. Y el dólar negro cuesta 200 bolívares. En cuanto a los medicamentos, no hay nada. De cada 10 medicamentos que buscas, encontrás 4. Murieron muchas personas que esperaban por ser operadas porque no había insumos. Además, hay una gran cantidad de accidentes de tránsito y, al no haber repuestos, hay una especie de cementerio de autos que no se pueden usar”, finalizó Berenice. A esto se suma que la mayoría de las industrias venezolanas llevan ya bastante tiempo operando a niveles muy inferiores de su capacidad instalada de producción, debido, entre otras razones, a las grandes dificultades para encontrar materia prima. Algunos empresarios piensan que esto se debe a las dudas entre las autoridades económicas del gobierno de Nicolás Maduro sobre cuál de las distintas tasas cambiaras debería ser usada para realizar la operación, debido a las vastas diferencias entre cada una de ellas, con una tasa que se encuentra vigente en 6,3 bolívares por dólar, otra que está en cerca de los 12 bolívares, una tercera que está en 190 bolívares y la del mercado negro que está actualmente en 250 bolívares. Pero la teoría que cobra mayor fuerza es la de que el gobierno simplemente no tiene los dólares requeridos para importar los productos.