El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, justificó el aumento anunciado en el recargo por gastos con tarjetas de crédito y débito en el exterior, al señalar que se trata de «un pago a cuenta» de impuestos con el objetivo de controlar «un drenaje de divisas que se da a través de operaciones de turismo».
«Hay un drenaje de divisas que se da a través de operaciones de turismo. Tenemos que ser cuidadosos en la administración de reservas», enfatizó Capitanich.
En declaraciones formuladas en la Casa de Gobierno, el funcionario señaló que el recargo se «toma como pago a cuenta» de impuestos.
El jefe de ministros señaló que se habían detectado «operaciones que se han realizado por empresas servicios turísticos, con ventas a plazos y financiamiento en pesos, que se liquidan en moneda extranjera por una valoración de paquetes turístico superiores».
«El sendero en que estamos transitando es el correcto. Ha disminuido sustancialmente la brecha desde el punto de vista de operaciones por fuera del mercado oficial. Hay nuevas inversiones y liquidaciones próximas», señaló Capitanich.