Enseñar el valor del dinero y potenciar el ahorro son factores que pueden ser determinantes para administrar con éxito los recursos en la adultez. Paola Padilla, docente de la Escuela de Ingeniería Comercial de la U. San Sebastián, entrega recomendaciones para que los niños desarrollen una cultura financiera.
Publicado : 30 Junio
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Muchos padres se cuestionan la necesidad y pertinencia de entregar una mesada a sus hijos, temiendo que no sean capaces de darle un buen uso; pero lo cierto es que bajo ciertos parámetros es un hábito recomendable para inculcar conceptos como el ahorro y el costo de las cosas.
“Es esencial que el niño tome consciencia que el dinero es un recurso escaso y pueda optimizar su utilidad. Debe saber que puede haber períodos en los que la entrega de dinero no sea constante o podría tener un gasto superior. Entender estos conceptos a través de la administración de una mesada es una actividad útil”, explica Paola Padilla, docente de la Escuela de Ingeniería Comercial de la USS.
La experta señala que es de gran utilidad que los jóvenes comprendan el valor del dinero desde temprano, puesto que pueden experimentar el ahorro y el esfuerzo por conseguir algo a largo plazo. De ahí la importancia de establecer metas y objetivos claros.
La docente de la USS explica que en la medida que los niños comprendan operaciones aritméticas básicas, ya son capaces de administrar bajas cantidades de dinero.
Dinero en efectivo o tarjeta: Una tarjeta de débito es prácticamente lo mismo que tener el dinero en el bolsillo y no implica riesgo de caer en un impago. La tarjeta de crédito no es recomendable porque los ingresos no son propios. Es bueno que los padres expliquen a sus hijos el significado de consumir con crédito y los riesgos de caer en morosidad.
Fijar un objetivo: A través de la administración de una determinada cantidad, los jóvenes pueden comprender conceptos como el ahorro, la responsabilidad en el consumo y el valor del dinero.
Estimular el ahorro: Es importante motivar al niño a guardar parte de su ingreso. Por ejemplo, si quiere ir a un concierto se puede llegar al acuerdo de que ahorre cierta cantidad de dinero y los padres abonarán el resto.
Establecer reglas claras: Desde el comienzo debe estar bien definido el monto y periodicidad de la entrega del dinero, asimismo no dar dinero extra si el niño gasta la mesada antes de tiempo.