El sistema bancario griego podría quedar en bancarrota el próximo lunes 13 de julio si el Gobierno de ese país no llega a un acuerdo con los acreedores este fin de semana, advierte el diario ‘Financial Times’.
La fuga de capitales del país, a pesar de todas las restricciones a los retiros, ha alcanzado los 100 millones de euros al día, señala el periódico británico citando a altos funcionarios bancarios griegos.
Según las fuentes, a este paso la liquidez del sistema bancario griego terminará el próximo lunes, a menos que el Banco Central Europeo se comprometa a prestar más dinero. Anteriormente el jefe de la asociación de bancos griegos dijo que los cajeros automáticos griegos tendrían dinero hasta el lunes.
Debido a que la crisis del país heleno se ha profundizado, sus bancos se han convertido en la principal vulnerabilidad que obligaría a Grecia a abandonar la eurozona.
Sin un acuerdo que proporcione cierto apoyo a su sistema financiero, el Gobierno se vería obligado a empezar a imprimir una nueva moneda para recapitalizar los bancos o incluso se verían obligados a declarar una quita a los depósitos bancarios, como ocurrió en Chipre en 2013, cuando se impuso un impuesto a los depósitos superiores a 100.000 euros.