Este miércoles derrapan 135 millones de dólares. Ayer se aprobó el pliego para formalizar a Juan Carlos Fábrega al frente de la entidad monetaria. Empiezan negociaciones con China y Rusia para conseguir financiamiento
Las reservas del Banco Central volvieron a caer otros u$s135 millones y quedaron en u$s 30.649 millones. La autoridad monetaria tuvo que vender u$s120 millones en el mercado de cambios para que la devaluación del peso no se acentúe mucho más, si bien el billete verde en el circuito oficial cerró a 6,20 pesos.
En lo que va de esta semana, los primeros tres días, las reservas caen 450 millones de dólares. La rapidez de la caída sigue generando preocupación en el mercado financiero y en el mismo Gobierno. Algunos creen que el Ejecutivo deberá lanzar nuevas medidas ya que tan solo devaluar el peso no sirvó para reactivar la oferta de dólares (proveniente de los sojeros) que permita calmar la demanda.
Por el contrario, la devaluación gradual y persistente hace que los exportadores esperen para liquidar sus dólares y eso impacte en la operatoria del Central que tiene que vender reservas.
Algunos creen que ahora que el Senado aprobó el pliego de Juan Carlos Fábrega al frente del BCRA empezarán a ejecutar nuevas medidas desde la autoridad monetaria. «No hay margen de acción sin el aval del Senado. Ahora es un presidente de Banco Central con todas las facultades que necesita», indicaba una fuente del Gobierno.
En paralelo, la estrategia del Gobierno es la de intentar conseguir fondos en el exterior para inversiones. Por eso el ministro de Planificación, Julio de Vido, ya viajó con rumbo a Rusia y China para negociar financiamiento para obras. Esos dólares que podrían ingresar por estos proyectos fortalecerían a las reservas. Claro que es una apuesta a mediano y largo plazo. En el entorno del funcionario se dice que irán a buscar inversiones por u$s17.000 millones.
Sea como fuere, por ahora el mercado de cambios está convulsionado y no parece que la caída de reservas disminuya en el corto plazo. El Gobierno intentó bajar artificialmente el dólar contado con liquidación vendiendo bonos de la ANSeS. Lo logró hasta este miércoles cuando rebotó por el aumento al 35% del recargo al dólar turista.
En el medio, se dice en el mercado, la ANSeS vendió $1.500 millones en tenencias de bonos para bajar esa cotización del dólar y que se acerque al valor del dólar oficial. Sacrificó bonos (que malvendió a la baja y por ende perjudica a futuros jubilados) para un resultado efímero.
Ahora la brecha entre el dólar oficial y el contado con liqui (y por ende el libre) se mantendrá pero ya no habrá «convergencia» como se ilusionaban en el entorno de Axel Kicillof. En lo inmediato, todo sigue igual: las reservas profundizan su caída.
Fuente > infobae.com