Entre septiembre y noviembre, un análisis de Telenoche reveló que las tarifas de los combustibles han escalado entre 8,5% y 10,4% según las distintas marcas. En contraste, el Índice de Precios al Consumidor se elevó solo un 4,5%, lo que marca una disonancia notable entre los precios de los combustibles y la inflación en general.

Subas por Empresa Petrolera

Durante el trimestre mencionado, las principales petroleras del país han registrado aumentos que superan la inflación, tal como indica ElDoce. En Shell, el precio de la nafta aumentó un 8,5%, llevando la nafta súper de $1556 a $1689 y la V-Power de $1862 a $1985. El diésel también experimentó incrementos en todas sus variantes.

Por su parte, YPF fue la que más subió, con un incremento promedio del 10,4%: la nafta súper pasó de $1460 a $1612 y la Infinia de $1682 a $1836. En comparación, Axion registró una suba del 9,6%, con la nafta súper que creció de $1483 a $1626 y la línea premium Quantum alcanzando $1909.

Puma también se sumó a la tendencia al aumentar sus precios en un 9,4%, llevando la nafta súper de $1449 a $1641 y el diésel Ion de $1699 a $1875. En contraste, el GNC se mantuvo estable, sin cambios en su precio, permaneciendo en $630.

Micropricing: Un Cambiante Mercado de Combustibles

Además de los aumentos mensuales, el innovador método de micropricing está revolucionando el sector. Este sistema ajusta los precios de los combustibles en tiempo real, dependiendo de la demanda y la oferta en diferentes franjas horarias. Este mecanismo puede resultar en cambios de precios a lo largo del día y podría generar discrepancias significativas entre estaciones de servicio que operan bajo la misma marca.

Debido a esta dinámica, los automovilistas deben estar atentos a las fluctuaciones de precios, ya que cargar nafta en ciertos momentos del día puede resultar más económico. Además, algunas promociones con bancos, tarjetas y métodos de pago pueden beneficiar a los consumidores y reducir el costo total de la carga.