Argentina ha optado por no suscribir el documento final del G-20 durante la cumbre que se celebra en Sudáfrica. Esta resolución se produce en el contexto de la decisión del presidente Javier Milei de no asistir al evento, manteniendo una postura próxima a la de Donald Trump.

Según un comunicado emitido por la Cancillería, el motivo detrás de esta decisión es el ”quiebre de las reglas del consenso” que deben regir en el foro. Se hizo hincapié en que la declaración aprobada no contaba con el acuerdo de todos los miembros, lo que contraviene las normas fundamentales del G-20.

Además, desde el gobierno se manifestaron “diferencias sustantivas” en las “consideraciones geopolíticas” que contiene el texto cuya aprobación se había solicitado. Esta posición refleja una clara intención de Argentina de mantener su independencia en los asuntos internacionales.

“Para Argentina, es primordial sostener la regla de consenso como base de la legitimidad en las decisiones tomadas en el marco del G-20”, señalaron fuentes de la Cancillería, que estuvo liderada por Pablo Quirno, quien asistió a la cumbre junto al canciller y el sherpa argentino ante el G-20, Federico Pinedo.

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