Starmer insiste en la necesidad de transparencia

Durante una reciente declaración, Starmer abordó la falta de respuesta de Andrew Mountbatten-Windsor a una solicitud de entrevista del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes de EE. UU. El ex príncipe, que fue despojado de sus títulos reales el mes pasado, se ha visto involucrado en un escándalo que lo vincula a Epstein, que ha dejado huellas profundas en su reputación.

“Aquellos que tienen información relevante deben presentarse y ofrecer su testimonio”, afirmó el primer ministro, subrayando la importancia de la cooperación en casos tan serios como este.

Un silencio que genera indignación

El comité ha intentado contactar al ex príncipe, estableciendo un plazo para su respuesta el 20 de noviembre. Sin embargo, hasta ahora, Mountbatten-Windsor no ha realizado ninguna declaración, lo que ha provocado el descontento de los miembros del comité.

Robert Garcia y Suhas Subramanyam, dos demócratas del comité, han afirmado que el silencio del príncipe “dice mucho” y que existe evidencia que requiere respuestas de su parte, ya que las acusaciones de Virginia Giuffre son serias y preocupantes.

El caso Epstein: un tema delicado

El informe que maneja el comité se centra en Epstein, quien falleció en 2019 mientras esperaba juicio por cargos de trata de personas. A pesar de las presiones, los demócratas podrían tener dificultades para hacer comparecer a Mountbatten-Windsor sin el apoyo de los republicanos, quienes dominan el comité.

Compromiso con la justicia

Garcia y Subramanyam han manifestado que, independientemente de la falta de cooperación del ex príncipe, el comité continuará su trabajo para asegurar que todos los involucrados en estos delitos sean responsabilizados, sin importar su estatus político o económico. “Buscaremos justicia para los sobrevivientes”, reafirmaron.

Ecos de un pasado complicado

A pesar de las críticas, es incierto si el presidente republicano del comité, James Comer, tomará medidas para obligar al príncipe Andrew a testificar, dada la sensibilidad que el tema genera en su partido. Recientemente, se aprobó la Ley de Transparencia de Archivos Epstein, que obliga al fiscal general a liberar documentos relacionados con la gestión del caso en un plazo de 30 días.

Andrew Mountbatten-Windsor ha negado cualquier tipo de comportamiento indebido y, si se emite una citación, podría eludir posibles sanciones legales evitando viajar a EE. UU.