Una de las preocupaciones del Presidente es resolver su movilidad. No sólo en la tierra, sino también en el cielo. Ya ordenó pedir a Peugeot, Citroen y Volkswagen una nueva flota de 408, C4 y Vento. Serán prestados en comodato.
Para viajar al exterior, Macri no usará más el Tango 01. La nave consume incalculables recursos. Necesita más de una decena de personas como tripulación y, además, en pocos meses debe someterse a un mantenimiento que dura tres meses y cuesta casi US$ 20 millones. Tiene 30 años y sólo vale por el peso de su aluminio.
Sus secretarios tejen las proyecciones de los costos para comprar una aeronave eficiente, moderna y pequeña.
Miran con interés el Gulfstream G 650, que cuesta unos US$ 60 millones nuevo y la mitad usado. Puede hacer vuelos sin escala hasta Moscú y tiene 14 butacas, además de un dormitorio para el Presidente. Es el mismo que usa el empresario Eduardo Eurnekián en sus viajes de negocios. Macri, formado en el mundo corporativo, ahora también quiere el suyo.
Fuente: http://www.bigbangnews.com/politica/Macri-intimo-entre-la-penumbra-de-su-despacho-y-el-nuevo-avion-presidencial-20151223-0063.html