Porqué jamás deberías hacer un balance de fin de año

1. Porque haciendo esta lista veras todo lo que no hiciste en un año. ¡Momento!, ¿dónde estuviste estos 365 días que no hiciste absolutamente nada?

2. Porque te vas a deprimir y frustrar notando todo lo que te faltó hacer. ¿Y ahora te acuerdas?

3. Porque del 31/12 al 1/1 tu vida será igual de miserable. Asúmelo.

4. Porque nadie quiere ver en las redes sociales tu balance. Ni tampoco quieren ver lo que comiste, ni tu relación sentimental, ni tu familia, ni nada.

5. Porque ya bastante tenemos con las listas de “la mejor película”, “la mejor serie”, “la mejor causa social que fue moda por unos posteos y ahora nadie recuerda”, “el viral del viral que se hizo viral”, como para además sumarle tu año.

6. Porque seguro tendrás que mentir mucho para no quedar como un fracasado. Yo muy bien… ¿y tú?

7. Porque seguro aparecerá alguien con muchos más logros intentando presumirlos.

8. Porque la desesperación de no haber servido para nada por 364 días te hará querer solucionar todo en un día. Ataque de pánico y estrés en 3… 2… 1…

9. Porque ni tu abuela quiere saber que ahora eres bisexual, ni tampoco es bueno que tus padres se enteren por Facebook que dejaste la universidad. 2016 y sigues sin saber filtrar tu muro…

10. Porque ni este año ni el año próximo dejarás de fumar, ni comenzarás el gimnasio, ni te pondrás de novio, ni harás la puta tesis. Pero sonríe, los carbohidratos te aman.

11. Porque la lista de amores frustrados y familiares muertos te deprimirá.

12. Porque gracias a la desilusión harás una lista el doble de ambiciosa para el próximo.

13. Y tampoco la cumplirás. Y el ciclo nunca terminará, ¡un ciiiiiiclo, sin fiiiiiin! Al carajo el ciclo.

14. Porque cuando lo veas escrito notarás que este año fue incluso peor que lo que recordabas. No lo hagas. Te lo estamos avisando.

15. Y no sólo eso, ahora todas tus redes sociales lo saben. ¿Tienes que ser tan ‘kamikaze emocional’?

16. El único que se beneficiará es tu terapeuta. Es y será tu relación más duradera.

17. Es momento de asumirlo, tu año no apesta, el que apesta eres tú.

18. En serio, nadie quiere saber cómo fue tu 2015.

19. Pero tranquilo, somos muchos los que tenemos una vida horrible. Eso es lo bueno de tener amigos fracasados, nadie te hará sentir mal por otro año horrendo.

20. Así que… ¡A LA BASURA 2015 Y BIENVENIDO 2016!

Sin metáfora: si estás condenado a muerte, hazlo con estilo.

Con o sin balance: ¡Feliz año nuevo!

Adiós 2015, bienvenido 2016.

Fuente: http://www.buzzfeed.com/lucasfauno/motivos-por-los-que-nunca-deberias-hacer-un-balance#.qwEMmaxmVw