La crítica situación de 90 mil civiles que tratan de huir de Siria mientras sigue la guerra

«La situación en el distrito de Azaz es desesperante, con combates que no cesan y decenas de miles de desplazados (…) Tenemos problemas para recibir y acomodar a la gente y sufrimos de falta de agua y condiciones sanitarias insuficientes en muchas áreas», advirtió hoy en un comunicado la jefa de la misión de Médicos Sin Fronteras en el país, Muskilda Zancada. Además de estar sobrepasados, la organización internacional de médicos denunció que al menos tres de los hospitales con lo que trabaja fueron bombardeados en la zona en las últimas semanas. Desde hace una semana, la ofensiva terrestre y aérea del Ejército sirio para recuperar el control de la provincia de Alepo -en el norte del país- forzó a más de 100.000 civiles a huir, abandonar sus casas y tratar de buscar refugio. El lugar seguro más cercano es del otro lado de la frontera turca. Médicos Sin Fronteras denunció que sus hospitales están sobrepasados y que al menos tres de los establecimientos con los que trabaja fueron bombardeados en la zona en las últimas semanas Con cada combate y cada bombardeo, crece el número de personas que escapa a la frontera turca. MSF estimó hoy que alrededor de 80.000 sirios ya avanzan hacia la ciudad siria de Azaz y el paso fronterizo turco de Kilis, mientras que otras 10.000 personas ya se encuentran varadas allí. Tras casi cinco años de fronteras abiertas para los refugiados, Turquía anunció que ha sobrepasado su capacidad de recibir gente y decidió no permitir más el ingreso de sirios que escapan de la actual ofensiva del Ejército en Alepo. Las autoridades turcas informaron ayer que no abrirán la frontera, pero ayudarán a los desplazados desde el lado sirio de la frontera. Sin embargo, la situación en la propia zona fronteriza se ha vuelto inestable y peligrosa con el avance constante del Ejército y los bombardeos de su aliado, Rusia. El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, organización pro opositora al presidente Al Assad y con sede en Londres, informó hoy que el Ejército continuó avanzando y ya recuperó el control de Kafin, un pueblo de la periferia norte de la ciudad de Alepo, a sólo 25 kilómetros de la frontera con Turquía, según la agencia EFE. MSF estimó que alrededor de 80.000 sirios ya avanzan hacia la ciudad siria de Azaz y el paso fronterizo turco de Kilis, mientras que otras 10.000 personas ya se encuentran varadas allí Mientras tanto, en el barrio vecino de Aslahiya, al menos 10 personas murieron hoy y otras 25 resultaron heridas por bombardeos aéreos, presuntamente lanzados por aviones rusos, según el Observatorio. La Media Luna Roja turca denunció, por su parte, que el corredor humanitario que utilizaba para llevar ayuda desde Turquía a Alepo está completamente cerrado debido a los intensos bombardeos rusos. «El área entre la ciudad de Alepo y Azaz está totalmente cerrada. Ninguna ayuda podrá llegar a Alepo dijo el director general adjunto, Kerem Kinik, a la cadena de televisión CNNTurk. Tras casi cinco años de fronteras abiertas para los refugiados, Turquía anunció que sobrepasó su capacidad de recibir gente y decidió no permitir más el ingreso Los combates en esta región norteña son un claro ejemplo de lo compleja que se ha vuelto la guerra en Siria y de la multiplicidad de grupos y actores que pelean en ella. No se trata sólo de Rusia. Actualmente el Ejército, con apoyo terrestre de la milicia chiíta libanesa Hezbollah y de la Guardia Revolucionaria iraní y aéreo de Rusia, pelea contra milicias insurgentes islamistas como el Frente al Nusra -la rama local de Al Qaeda- y otros grupos rebeldes como el Ejército Libre Sirio y los kurdos de las Unidades de Protección del Pueblo (YPG). Estas dos últimas milicias opositoras sirias cuentan con el apoyo financiero, militar y logístico de Estados Unidos y sus potencias europeas aliadas. La ONU informó que más de 260.000 personas murieron y más de la mitad del país ya tuvo que abandonar sus hogares y buscar refugio dentro y fuera del territorio El Consejo de la Provincia de A