Mientras genera polémica en Buenos Aires, Uber empezó a funcionar en Madrid

Según explicó la empresa en un comunicado, su utilización supone un ahorro del 30% del precio respecto a otras alternativas «tradicionales» como el taxi en trayectos por la ciudad y hasta el 40% para ir al aeropuerto. Uber comenzó a operar en España en abril de 2014 en Barcelona y en septiembre en Madrid, pero en diciembre de ese año la justicia ordenó el cese mediante una cautelar y prohibió su actividad, al considerar que sus conductores carecían de autorización administrativa y que su actividad suponía una competencia desleal. El comienzo de su actividad generó numerosas movilizaciones y huelgas del gremio de taxistas españoles, y sus conductores y la empresa recibió multas, recordó la agencia EFE. La compañía acató la decisión judicial, se comprometió a colaborar con las autoridades en el desarrollo de un nuevo marco regulatorio «para crear un espacio justo para Uber y la economía colaborativa» y a fines del año pasado anunció su intención de retomar la actividad en España con conductores profesionales. Finalmente lo concretó hoy con uberX donde promete a los madrileños «disfrutar de viajes cómodos y seguros con tan sólo apretar un botón en su celular, a un precio tan asequible que les hará cuestionarse si merece la pena conducir su propio coche». Para poder registrarse en la plataforma de Uber, los conductores deben cumplir diversos requisitos, además de disponer de un vehículo con licencia. La empresa comprueba que los profesionales estén dados de alta en el régimen de autónomos o constituidos como empresa, los antecedentes penales del conductor, la ficha técnica del vehículo y la vigencia del seguro. El jefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, confirmó ayer que Uber «no ha hecho ninguna presentación» formal para comenzar a funcionar, aunque la firma tecnológica ya empezó a registrar conductores para prestar el servicio. En tanto que los gobiernos de La Plata, Córdoba y Santa Fe rechazaron el desembarco del servicio por considerar que no cumple con la normativa vigente para el transporte de pasajeros.