¿Por qué desarrollamos este mal hábito de querer lo que no podemos tener? ¿Por qué no siempre queremos lo que podemos tener?
Según Helen Elizabeth Fisher que es una antropóloga y bióloga estadounidense que investiga el comportamiento humano, dice : La razón por la que el rechazo romántico nos engancha es que este tipo de rechazo estimula partes del cerebro asociadas con la motivación, la recompensa, la adicción y los antojos.
Utilizando una resonancia magnética funcional, su equipo examinó el cerebro de 15 hombres y mujeres de edad universitaria que recientemente habían sido rechazados por sus parejas, afirmaban que todavía estaban intensamente “enamorados”.
Durante la exploración, los sujetos de la investigación miraron una foto de la persona que los había rechazado. Luego completaron un ejercicio de matemáticas, como contar hacia atrás de 4.529 hasta 7. El ejercicio fue un intento de distraer a los participantes de sus pensamientos románticos. Finalmente, se les mostró una foto de una persona neutra para ellos.
El equipo encontró que los cerebros de los participantes eran más activos en áreas relacionadas con la motivación, la recompensa, el antojo, la adicción, el dolor físico y la angustia cuando miraban la foto de la persona que los había rechazado que cuando miraban la foto de la persona neutra.
El estudio, muestra que las personas en esta situación están sufriendo realmente de una adicción a las drogas, y la droga es la persona que nos rechaza, dejando nuestro amor no recíproco. Pero los resultados no nos dan una idea de por qué respondemos al rechazo romántico de esta manera, y no responde a la pregunta de cómo hemos desarrollado esta preocupante tendencia de querer a las personas que no podemos tener.