La Onda Cambiante: El Asalto a la Memoria Histórica en Argentina
¿Un Nuevo Rumbo para las Fuerzas Armadas?
La reciente propuesta de Javier Milei de revalorizar a las Fuerzas Armadas ha desatado un intenso debate sobre la memoria colectiva y los derechos humanos en Argentina.
Desde el retorno de la democracia en 1983, los presidentes argentinos han compartido un consenso esencial: reconocer las violaciones de derechos humanos ocurridas durante la dictadura militar de 1976 y garantizar que los militares no vuelvan a ejercer influencia política. Sin embargo, eso podría estar cambiando con la llegada de Javier Milei al poder.
Una Nueva Perspectiva sobre las Fuerzas Armadas
Milei propone que es momento de que la sociedad cambie su percepción de las Fuerzas Armadas y sugiere, sorprendentemente, olvidar los crímenes del pasado. Esta postura marca un quiebre con la idea del «Nunca Más», coincidiendo con el 40º aniversario del Juicio a las Juntas. El líder de La Libertad Avanza afirma que los militares no necesitan disculparse por los desaparecidos ni por los abusos cometidos durante la dictadura.
Designación Controvertida en el Ministerio de Defensa
La reciente elección de Carlos Alberto Presti, un general en activo, como nuevo Ministro de Defensa simboliza un giro significativo. Esta es la primera vez que un militar en funciones asumirá un rol tan crucial, encargado de asegurar la subordinación civil de las Fuerzas Armadas. Presti, quien nunca ha expresado una opinión sobre los crímenes del terrorismo de Estado, genera inquietud sobre cómo será el futuro vínculo entre los militares y la sociedad argentina.
Un Pasado que Regresa
El padre de Presti, Roque Carlos, fue acusado de crímenes de lesa humanidad durante la dictadura. Fue responsable de la represión en el área que abarcó varios Centros Clandestinos de Detención, incluyendo la emblemática casa Teruggi-Mariani, donde fue secuestrada Clara Anahí, aún desaparecida.
Su designación coincide con un fenómeno creciente en el ámbito de Defensa, donde se promueven seminarios que reinterpretan la historia de la dictadura bajo lo que algunos denominan «verdad completa», minimizando la gravedad de las violaciones a derechos humanos. En medio de esta relectura, el clima parece propicio para que las posturas negacionistas cobren fuerza.
Marchas por la Impunidad
Ayer, en Plaza de Mayo, se realizó la primera marcha de familiares de represores que reclaman por la impunidad de los acusados y exigen el cese de los juicios por delitos de lesa humanidad. La movilización fue convocada por la organización Pañuelos Negros, que defiende el accionar militar durante la dictadura.
El Contexto Social
La confianza en las Fuerzas Armadas en Argentina se encuentra en niveles alarmantemente bajos, con solo un 13% de apoyo en contraste con países como El Salvador y Chile, donde la aceptación es mucho más alta. A nivel continental, el Latinobarómetro 2024 señala un posible resurgir de tendencias autoritarias, donde un 35% de los encuestados en la región considera atractivo un gobierno militar ante crisis profundas.
Desafíos a la Democracia Argentina
En una ceremonia de alta relevancia, Milei planea que Presti asuma el cargo en un evento marcado por el despliegue de aviones F-16, adquiridos recientemente. Este acto podría parecer decoroso, pero encierra la incertidumbre de que un militar en activo, que mantiene vínculos con el Ejército, no renuncie formalmente a su puesto.
Otros países han establecido claras barreras entre lo civil y lo militar, exigiendo que los altos mandos se retiren antes de asumir cargos en Defensa. La presencia de un militar en actividad en esta cartera representa un riesgo significativo para la salud de la democracia argentina.
La Tensión entre Civilidad y Militarismo
El destacado politólogo Samuel Huntington alertaba sobre la compleja relación entre las Fuerzas Armadas y los civiles, abogando por un control cívico efectivo. Este cuestionamiento se vuelve aún más pertinente en el contexto actual, donde el control civil sobre el ámbito militar se encuentra en debate.
Como país, Argentina debe confrontar preguntas que reviven las heridas de un pasado doloroso, explorando si la memoria colectiva sobre los crímenes de la dictadura será preservada o si, por el contrario, se verá eclipsada por nuevas narrativas. La llegada de Javier Milei y su agenda plantea un dilema crucial sobre la dirección que tomará la relación entre el Ejército y la sociedad en los años venideros.
