Las claves para adelgazar de la creadora de la dieta del metabolismo acelerado que le dio resultados a Malena Guinzburg
Haylie Pomroy ya es un nombre conocido entre gran parte de los argentinos. En el mundo, su popularidad roza la de una celebritie. No es actriz, cantante ni deportista. Sin embargo, sus seguidores la admiran cual estrella de rock. La nutricionista estadounidense, creadora de la dieta del metabolismo acelerado, saltó a la fama en nuestro país cuando la humorista Malena Guinzburg publicó en sus redes sociales el resultado de 28 días de régimen. En rankings argentinos su libro está bien arriba en el top ten. En tiempos en los que médicos y nutricionistas se esfuerzan en recordar que las dietas mágicas no existen y no recomiendan realizar dietas estrictas y pasajeras -sino comer en forma sana, equilibrada y sin restricciones excesivas (para evitar los atracones)-, Pomroy se autodefine como la entrenadora personal de tu metabolismo. Cuenta cómo incorporar hábitos saludables sin caer en prohibiciones. La popularidad de la dieta del metabolismo y mi trayectoria sobre la pérdida de peso se deben a que la dieta funciona y sin necesidad de privaciones. Al utilizar el metabolismo propio para quemar combustible, se ingieren más alimentos, pero los correctos, lo cual difiere de la mayor parte de las dietas que restringen el hecho de comer, relató Pomroy en diálogo con Clarín. Creo que la única magia real de una dieta es que una persona promedio sepa cómo nutrir su metabolismo. No se trata de engañar al cuerpo, sino de proporcionarle lo que ya necesita, desea y utiliza. A menudo, los resultados parecen mágicos porque muy frecuentemente las personas no nutren su metabolismo. Las dietas que prometen pérdida de peso luego de realizar enormes desviaciones en los hábitos alimenticios o en la alimentación casi nunca funcionan ni son sostenibles. Yo les enseño a las personas a hacer lo que su cuerpo ya está diseñado para hacer. Sin dudas, una rápida pérdida de peso puede ser perjudicial si se pierde masa muscular. Sin embargo, la pérdida rápida de grasa no es perjudicial, sino todo lo contrario. Al hablar de pérdida de peso, utilizamos una forma tangible para que las personas comprendan que esto implica pérdida de grasa. Siempre digo que la palabra dieta significa, en inglés, ¿comiste hoy? (DIET: Did You Eat Today?). Hay que comer y no privarse de ningún alimento, ni siquiera de los alimentos que nos encantan. Se deben cambiar los alimentos que no son sanos por aquellos que representan mejores elecciones con un mayor nivel de nutrientes, que ayudan al metabolismo exclusivo de cada uno. Pero el principio fundamental se basa en no sentir la privación. Si uno se priva de ciertos alimentos y siente hambre, no resultará. Existen diversos motivos por los que hay altos índices de sobrepeso y obesidad. Contamos con acceso ilimitado a cualquier alimento y los fabricantes de la industria alimenticia están diseñando productos que generan mayores deseos de ingerirlos. A menudo, los conservantes y químicos presentes en los alimentos causan estragos en el sistema endocrino. Además, actualmente realizamos mucho menos actividad física que en cualquier momento de la historia humana, y nuestra evolución no se ha adaptado a ello. Todos estos factores derivan en una sociedad con una crisis de obesidad. En mi país constantemente se revisan las pautas nutricionales. La investigación hace que los buenos hábitos sean un objetivo en continuo desarrollo. El otro factor se relaciona con las tradiciones o normas culturales que estandarizan elecciones incorrectas, como el predominio de restaurantes de comida rápida y otros factores asociados con los alimentos precocinados. Además, generalmente, el marketing que realizan las empresas alimenticias desafía la sabiduría nutricional con el fin de captar la atención de las personas. El sedentarismo es una consecuencia de las exigencias de la vida moderna. Por supuesto. Piensen cuánto tiempo dedicamos a estar sentados frente una computadora todo el día. Ya no trabajamos al