El número superó las expectativas de economistas y consultoras, que había predicho un avance de entre 2,4 y 3%. Si bien bajó con respecto a abril, el IPC núcleo –que no mide precios estacionales ni regulados– se incrementó con respecto a abril. Alimentos y bebidas fue el rubro más castigado
El INDEC difundió este jueves la medición de inflación de mayo y se ubicó por debajo de las estimaciones independientes: 2,1%, seis puntos menos que los 2,7% registrados en abril.
De esta forma, el costo de vida acumuló 11,9% en lo que va del año, muy cerca del 15% que había propuesto el Banco Central en la meta «recalibrada» de diciembre.
Los aumentos fueron liderados por el rubro Comunicación (3,9%), por el aumento de la tarifa celulares; seguido por Alimentos y Bebidas, que marcó una suba de 3,3%. Detrás se ubicaron Recreación y cultura (2,5%), Restaurantes y hoteles (2,4%). Salud y Equipamiento para el hogar sumaron 2,2% cada uno.
A pesar de que el índice general mostró un importante retroceso, el valor que más inquieta al Gobierno mostró un avance inversamente proporcional: la inflación núcleo, que agrupa los productos con precios no regulados ni estacionales, se ubicó en 2,7%, contra el 2,1% registrado en abril. Por su parte, los estacionales y regulados quedaron en 2,5% y 0,4%, respectivamente.
En el desglose geográfico, Cuyo fue la región donde se registró un menor impacto de la inflación, con 1,8%; seguida del área metropolitana (Capital Federal y Conurbano), que midió 1,9%. Detrás se ubicaron las zonas Patagonia (2%), Pampeana (2,2%), Noroeste (2,3%), y Noreste (2,6%).
Pero no sólo subieron los precios minoristas, también los mayoristas. Según el relevamiento del INDEC, el incremento fue de 7,5% en mayo respecto de abril último y acumulan en el año un alza del 22,3%.
De acuerdo con el indicador del Sistema de Indices de Precios Mayoristas, los precios crecen 37,7% en los últimos doce meses. El aumento de precios de mayo fue consecuencia de un incremento del 6,9% en productos nacionales y 15,3% en importados.