La Demora Británica Genera Tensiones Diplomáticas

El miércoles, China criticó abiertamente al gobierno del Reino Unido tras el anuncio de que la aprobación para la construcción de su nueva embajada se retrasaría desde el 10 de diciembre hasta el 20 de enero por razones de seguridad.

Lin Jian, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, calificó la postergación como «completamente injustificada», argumentando que las razones ofrecidas por Londres son «inaceptables».

Un Proyecto Enmarcado en la Controversia

El plan para la nueva embajada, que se situaría en Royal Mint Court, cerca del distrito financiero y sensibles cables de datos de Londres, ha estado estancado durante años. Este edificio, en caso de ser aprobado, se convertiría en la embajada más grande de Europa, abarcando 20,000 metros cuadrados.

Preocupaciones Sobre Espionaje

Numerosos críticos han alertado que la embajada podría ser utilizada como base para actividades de espionaje. Además, legisladores de diferentes sectores han instado al gobierno del Reino Unido a rechazar el proyecto.

Reacciones del Gobierno Británico

La agencia de planificación del gobierno británico argumentó que la decisión necesitaba más tiempo para ser considerada adecuadamente. Tom Wells, portavoz del primer ministro Keir Starmer, comentó que tanto el Ministerio del Interior como el de Relaciones Exteriores habían señalado preocupaciones sobre las implicaciones de seguridad y que no se tomaría una decisión hasta resolver dichos aspectos.

Contexto Político y Diplomático

El retraso ha suscitado especulaciones de que podría estar vinculado a la próxima visita de Starmer a Beijing, programada para principios del año que viene, lo que añade una capa adicional de complejidad a este tema sensible en las relaciones internacionales.