La visita ocurre en un contexto complejo marcado por la guerra en Ucrania, y tiene como objetivo resaltar el tratado de Kensington firmado en julio. Este acuerdo, el primero formal entre el Reino Unido y Alemania desde la Segunda Guerra Mundial, busca fomentar la cooperación en áreas clave como migración, defensa, comercio y educación.

Refuerzo de la Amistad Histórica

En un banquete estatal en el Castillo de Windsor, el Rey Carlos III recordó cómo ambos países han superado «los momentos más oscuros» de su historia, enfatizando que el reconocimiento del sufrimiento pasado ha cimentado una amistad renovada. Destacó las «valores compartidos» y la «visión conjunta» para un futuro estable y pacífico.

Compromiso con la Seguridad Europea

Steinmeier, presente junto a la Princesa de Gales, subrayó la importancia del tratado de Kensington al manifestar que ambos países trabajan juntos para «fortalecer los lazos humanos debilitados por el Brexit». Afirmó que están colaborando para promover la seguridad y la defensa, apoyando a Ucrania y trabajando por una Europa libre y pacífica.

Honor y Tradición en la Recepción

El presidente alemán recibió un saludo militar y una bandera real celebratoria al llegar, mientras que durante un paseo en carruajes por las calles de Windsor, el rey y la reina Camilla acompañaron a Steinmeier y su esposa, Elke Büdenbender. La visita incluirá un emotivo homenaje a la catedral de Coventry, destruida en la Segunda Guerra Mundial.

Mejorando Relaciones Post-Brexit

Previo a sus conversaciones privadas con el Primer Ministro Keir Starmer, Steinmeier expresó que la relación entre el Reino Unido y Alemania se encuentra en «mejores condiciones» tras el difícil período post-Brexit, gracias al nuevo acuerdo. Se hizo eco de la necesidad de una cooperación más estrecha en respuesta a la nueva situación de seguridad en Europa.

Un Banquete de Intercambio Cultural

El banquete contó con una ambientación navideña, con un enorme árbol decorado y un menú que incluyó exquisiteces como tartaletas de trucha ahumada y partridge de Windsor, culminando en un delicioso pastel Alaska. Entre los 152 invitados se destacaron personalidades como la supermodelo Claudia Schiffer y el compositor Hans Zimmer.

Regalos y Controversias

Durante el tradicional intercambio de regalos, el Rey Carlos obsequió al presidente alemán una bastón de mano artesanal, mientras que Steinmeier ofreció un paraguas y un queso especial. Sin embargo, la visita no estuvo exenta de controversias, con un grupo anti-monarquía acusando a la policía de amenazar a los manifestantes durante el paso de la procesión real, un hecho que fue desmentido por la policía, quienes aseguraron haber facilitado la protesta pacífica.