El origen de esta celebración se remonta al Primer Congreso de Publicidad realizado en 1936 en Buenos Aires, un evento que marcó un antes y un después en la profesionalización del sector y en la difusión de prácticas creativas y comunicativas de calidad.

El Congreso de 1936: Un Cambio de Paradigma

Convocado por la Asociación de Jefes de Propaganda, el congreso buscó unificar criterios entre los profesionales y establecer un marco para la enseñanza formal de la publicidad en Argentina. Esta reunión no solo promovió la colaboración, sino que también resultó en la creación del Día de la Publicidad, un reconocimiento a la importancia de la profesión.

Fundación de la Asociación de Jefes de Propaganda

Durante este congreso, se estableció la Asociación de Jefes de Propaganda, precursoras de las organizaciones que hoy constituyen el núcleo del sector. Su misión fue fomentar la investigación y el desarrollo constante de la publicidad, cimentando una estructura laboral más sólida y reconociendo la publicidad como una disciplina estratégica.

Los Inicios de la Publicidad en Argentina

Los primeros rastros de publicidad en Argentina datan de principios del siglo XIX, con anuncios en publicaciones como El Telégrafo Mercantil. Sin embargo, la verdadera evolución comenzó en el siglo XX, cuando emergieron las primeras agencias y marcas. La década de 1920 fue crucial, dado que el crecimiento económico del país permitió el desarrollo de nuevas estrategias publicitarias que incorporaban elementos psicológicos.

Impacto Cultural y Creatividad

El Día de la Publicidad es, por ende, un homenaje a la creatividad y al impacto cultural que esta disciplina genera. Más allá de su propósito de vender productos, la publicidad también actúa como un reflejo de la sociedad, capturando y moldeando hábitos de consumo y tendencias culturales, como se observa en numerosas campañas memorables.

La Publicidad en la Era Digital

Hoy, este día celebra la transformación de la publicidad en un entorno digital en constante evolución. Aunque los medios tradicionales como la radio y la televisión siguen siendo relevantes, el crecimiento de Internet y las redes sociales ha cambiado radicalmente la forma de conectar con las audiencias. Las nuevas herramientas tecnológicas brindan la capacidad de interactuar de manera más específica y efectiva con el público objetivo.