El triunfo del ‘Brexit’ en el referendo para separarse de la Unión Europea (UE) causó un sacudón en el Reino Unido que se sintió hasta en el Atlántico sur.
Pasadas apenas unas horas luego de oficializarse el resultado, trascendieron preocupaciones que los isleños ya habían expresado sobre el impacto en la economía de ese territorio de ultramar reclamado soberanamente por Argentina.
La salida del Gran Bretaña de la UE causará, en primer término, «que se anulen en Malvinas los tratados que les permitían a los isleños exportar a Europa sin ningún tipo de barreras arancelarias», dice una nota del portal Perfil.
El texto cita a la delegada de Malvinas en Londres, Sukey Cameron, que previo al referendo presentó un informe ante la Cámara de los Comunes prendiendo las alarmas: «el 70 % del Producto Interno Bruto (de las islas) depende del acceso a la UE. Un cambio que restrinja el acceso de nuestros productos al mercado común europeo podría ser catastrófico».
Otro elemento quizá más alarmante para los kelper —como llaman en Inglaterra a los habitantes de estas islas— supone un escenario en el que la UE retire su apoyo en bloque y Argentina tenga un campo político más favorable en su reclamo territorial.