Alfredo Casero, contra el feminismo: Hay desquiciadas que quieren matar y castrar a los hombres
Durante la movilización del 8M muchos artistas salieron a dar su apoyo a la masiva marcha organizada para pedir contra la violencia de género y el maltrato machista dentro de la sociedad. Plantándose como amante de la belleza femenina el humorista Alfredo Casero estuvo en televisión, donde dio su visión sobre el actual movimiento feminista. Cuando los conductores de TN Central Nicolás Wiñazki y Luciana Geuna lo consultaron sobre el tema, el actor comentó que se le hace complicado hablar sobre las mujeres en sus shows. No podés hablar de las mujeres. No puedo creer esto. Crié hijas, he tenido grandes amores. Automáticamente cuando decís algo que no es lo correcto se pone en funcionamiento una tenaza que te destruye. Siempre van a encontrar algo. Podés ser destruido fácilmente. Estamos apostando a la violencia en vez de la no violencia, comentó. Casero se opuso a que durante la movilización se pidiera violencia contra el hombre, según dijo. No me gusta que hablen de matar al machirulo, como dicen en España, opinó. También comentó que se siente mal cuando la lucha por una política racional se convierte en otra cosa. Es una pena que se use ese gran potencial humano para eso, argumentó. Lo que es violencia me hace daño. Hay mujeres que se sacan el burka y ahora vienen otras que vienen con una bombacha y se la ponen en la cara, con puntilla. ¿Para quién es eso? ¿Por qué nos quieren matar? ¿Están locos? Locas y locos, locxs, bromeó el comediante. Luego, hizo una referencia a una reconocida escritora y activista feminista que atentó contra el artista Andy Warhol. No podés tomar como feminismo a Valerie Solanas que decía que había que matar el macho. Hay mujeres desquiciadas que dicen que hay que matar y castrar a los hombres, lanzó. El actor afirmó que no se vio reflejado en la marcha del 8M: Me asusta pensar que soy el enemigo. Nunca planteo la enemistad. Hice Cha Cha Cha y jamás hubo una risa grabada ni una mujer maltratada. Ojo con los tipos que daban cátedra y después se hacen los feministas. Finalmente, Casero puso reparos para con algunas integrantes del movimiento feminista. La idiotez, necedad y boludez no tienen género. A mí me gusta llevar cierta tranquilidad a la gente que tiene miedo. Entiendo que no se puede cambiar el mundo sin extremos, pero no hay que apostar a lo malo, cerró.