La dirigente Alicia Castro renunció este miércoles a ser embajada en Rusia, cargo en el que había sido designada en diciembre pero que aún no había asumido ya que su pliego no había sido tratado por el Senado.
“Hoy quiero presentar mi renuncia como embajadora, porque no estoy de acuerdo con la actual política de Relaciones Exteriores“, declaró Castro al sitio #LaGarcía.
La decisión de la dirigente del kirchnerismo duro llega horas después de haber repudiado la decisión del Gobierno de condenar la violación de los derechos humanos en Venezuela.
El martes, Castro había apuntado contra el canciller Felipe Solá al advertir que “votó la resolución del Grupo de Lima condenando a Venezuela con (Jair) Bolsonaro, (Iván) Duque, (Sebastián) Piñera y (Martín Viscarra), en cuyos países se violan flagrantemente los Derechos Humanos”.
La ex funcionaria de Cristina Kirchner consideró que esa decisión de la administración de Alberto Fernández representa “un lamentable giro en política exterior”.