De forma sorpresiva y mediante un comunicado de prensa, el gobierno de Alicia Kirchner pidió a la Dirección Nacional de Vialidad que “tome medidas urgentes para resolver la grave situación y el hartazgo que genera a toda la sociedad santacruceña en su conjunto la paralización» de las obras a cargo de las empresas de Báez en la provincia de Santa Cruz.
De esta manera, el gobierno santacruceño pretende encontrar una peculiar salida al conflicto que se profundizó esta semana y provoca el desabastecimiento de combustible en distintas localidades de la provincia.
Hasta ayer, en Caleta Olivia, unos 60 camiones de combustibles estaban varados por el reclamo de los trabajadores nucleados en UOCRA que piden por el pago de salarios atrasados y la continuidad de las obras públicas en esa provincia.
“El corte de las rutas nacionales N° 3 y N° 40 por parte de los trabajadores de la empresa Austral Construcciones y Kank y Costilla lleva al desabastecimiento y la paralización de la actividad económica y productiva”, añadió el comunicado oficial.
Además, sostiene que habrá “consecuencias sociales y de salud negativas por el incumplimiento del dueño de las empresas el señor Lázaro Báez”.
El secretario general de UOCRA Santa Cruz Zona Norte, Cristian Salazar, sostuvo que Alicia Kirchner “fue elegida para gestionar y nosotros necesitamos que se ponga al frente y gestione”.
“El gobierno provincial tiene participación en estas obras, ellos tienen que estar a la altura de las circunstancias”, completó el pedido. (Cronista)