Alimentos para tratar el higado graso
1) Alcachofas (alcauciles): Las alcachofas tienen la capacidad de regenerar el hígado gracias a que contienen un bioflavonoide llamado cinarina, que ayuda a recuperar las células hepáticas. Además de utilizar este vegetal en sí mismo también podemos preparar infusiones con las hojas y los tallos. El jugo de alcachofa es un excelente depurativo del hígado. En caso de que quieras utilizarlo en infusiones debes beber tres tazas al día.
2) Acelga: Esta verdura además de ser nutritiva y tener altas cantidades de vitaminas y su principal componente mineral que es el hierro, también tiene un excelente efecto depurativo y rejuvenecedor del hígado. Además, aporta fibra que combate el estreñimiento y otros minerales como magnesio y potasio.
3) Jengibre: El jengibre ha cobrado estos últimos tiempos una importancia crucial en lo que se refiere a la limpieza del organismo y del hígado en particular. Contiene antioxidantes que limpian los órganos y que ayudan a disminuir los triglicéridos, uno de los principales causantes del hígado graso. Puedes preparar una infusión rallando dos cucharadas de jengibre o bien puedes incorporarlo de esta misma manera en ensaladas o sopas.
4) Cardo mariano: Esta planta contiene importantes propiedades medicinales y en especial actúa como un excelente protector del hígado. Su principal sustancia benéfica es la silimarina, que ayuda a proteger y regenerar las células del hígado en poco tiempo. Esta planta medicinal puedes encontrarla en herbolarios o también adquirir las cápsulas con extracto de cardo mariano en tiendas especializadas.
5) Toronja (pomelo): La mayoría de los cítricos tienen efectos benéficos para el sistema hepático en general, pero en particular la toronja que contiene naringenina, se considera benéfica porque activa los químicos encargados de la oxidación de los ácidos grasos. También se le atribuye la capacidad de disminuir la grasa corporal y reducir el síndrome metabólico que son causantes del hígado graso.
6) Rábanos: Los rábanos ayudan a desinflamar la bilis y esto redunda en un beneficio para el hígado. Es un eficaz desintoxicante. Principalmente se consumen como un ingrediente más de las ensaladas pero también se pueden preparar jugos a los que puedes agregarles una cucharadita de miel.