Así fueron los últimos momentos de vida de Rocío Gancedo
Desde noviembre del año pasado, la vida de Rocío Gancedo cambió para siempre, cuando falleció su padre. Cayó en un pozo depresivo que la llevó a una internación en un instituto neuropsiquiátrico. Cuando le dieron el alta se mudó sola a un departamento ubicado en las Cañitas. Del quinto piso de ese edificio fue donde se arrojó ayer al mediodía, cuando decidió quitarse la vida. ¿Qué hizo antes? Según manifestó su ex representante Jorge Zonzini en Intrusos, la modelo había hablado con su mamá. «No sabemos el tenor de esa charla, pero me contó Cinthia (cuñada de Rocío) que unos minutos antes de tirarse había hablado por teléfono con su madre». Esto podría quedar determinado después de que se hagan las correspondientes pericias, ya que la policía secuestró de la casa no sólo el celular de la modelo, sino también una computadora y una tablet. Además, desde hacía unos meses Rocío había decidido alejarse del medio televisivo, aunque era bastante inestable desde lo emocional y por eso no terminaba de definir qué quería para su futuro. Por otro lado, un par de semanas atrás, y pese a que atravesaba serios problemas económicos, había renunciado a un trabajo como recepcionista en una barbería. Sostenía que ella no podía estar sirviendo café a los clientes porque le daba vergüenza ser reconocida como la modelo que había sido tapa de revistas, que hizo producciones muy audaces con su cuerpo totalmente desnudo y algunas participaciones en obras de teatro y programas donde su principal destaque era su físico. Antes había incursionado en política. Integró una lista a diputados nacionales de la agrupación Amarte Argentina, armada por el diputado bonaerense del Frente para la Victoria José Ottavis en la que también estaban Daniel «La Tota» Santillán, y la mediática Alicia Barbasola. Hasta 2014 militó para Sergio Massa en el Frente Renovador, pero el año pasado salió en defensa del ex camporista cuando explotó la polémica sobre la participación de Ottavis en un teatro de revista: «José es un hombre que sufrió mucho, si se quiere poner plumas o polleras, si quiere ir al Bailando, se lo merece porque lo pagó por adelantado por la vida sufrida que tuvo», afirmó en su momento. Inclusive muchos especularon que entre ellos hubo «algo más» que una relación laboral.