Jonathan Luna es un joven de 26 años que se encuentra detenido en Bahía Blanca luego de haber confesado el crimen de Micaela Ortega. Al momento del asesinato tenía un pedido de captura den Río Negro. Los investigadores descubrieron que tenía múltiples perfiles de Facebook con nombres diferentes (Yona Moya, Yonii de River, Yoni TKb TKb) y todos sus contactos son mujeres (muchas menores de edad). A través del chat de uno de ellos, en el que se hacía pasar por una chica de 12 años, el sospechoso habría logrado contactar a Micaela Ortega, de la misma edad, aunque real. Allí pactaron un encuentro que sería el principio del fin para la chica que había desaparecido el 23 de abril. Su última imagen, tomada por tres cámaras de seguridad, la mostraban caminando con un hombre que sería Luna. El sábado por la noche, los investigadores volvieron a la humilde vivienda de chapa que él ocupaba en un sector del barrio El Saladero, a unos 7 kilómetros del centro de Bahía Blanca. Ya habían estado allí, en los primeros días de búsqueda de Micaela, cuando las pesquisas se dirigían hacia ese sector y el de Ingeniero White. Sin embargo, esa vez, no encontraron nada para involucrar a Luna con el caso. Ahora, las pruebas fueron contundentes: había una campera quemada y un teléfono celular, que pertenecían a Micaela. Cercado, se quebró y dijo ante la Policía dónde había llevado, asesinado y dejado a la nena. Todo habría ocurrido a las pocas horas de haberla contactado.
Así operaba en las redes sociales el asesino de Micaela
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