Así vivió el calvario la mujer secuestrada en Gesell

Mónica Stifelman, de 61 años, se mudó a Villa Gesell para acompañar a su madre. Lo que menos pensó es que iba a vivir éste calvario. Stifelman conoció a José Agustín Ginepro, y comenzaron una relación. Iban a comer, salían como cualquier pareja hasta que advirtió actitudes de violencia y quiso terminar el vínculo. Habían pasado 8 meses de noviazgo. Ahí salió a la luz el verdadero «Papi Ginepro», un hombre oscuro con un pasado terrible. Mónica sufrió violencia de género y reiteradas amenazas para continuar con la relación. Ninguna persona cercana sabía de la gravedad de la situación, hasta este momento. Se presume que ejercía esa presión para poder apropiarse de la casa donde vivía Stifelman con su madre. «Te voy a matar a tu hijo» , «A tu mamá le voy a cortar las piernas, y que me venga a buscar el putito de tu hijo, el karateca», le decía según reveló una fuente judicial. Mónica estuvo desaparecida durante un mes y medio. Ahora está internada, reponiéndose del desgaste físico y mental que vivió. En las próximas horas tiene que ir a declarar por la causa que está caratulada como «privación ilegítima de la libertad agravada por calidad», porque Stifelman es discapacitada visual. José Ginepro está demorado, al igual que otras dos personas de su familia vinculadas a la causa. «El clan Ginepro» es muy temido en Gesell, por eso no hay testigos que quieran declarar. Entre los delitos que se les imputa, se encuentran -además de una causa por homicidio- varios robos a mano armada, hurtos, amenazas calificadas, lesiones, daños, incendios, abusos de arma, estafas y encubrimientos, todos cometidos en Villa Gesell y localidades vecinas. Mónica, una vez que esté recuperada, volverá a Buenos Aires. Fuente: http://justiciacero.diarioveloz.com/notas/116668-asi-fue-el-calvario-la-mujer-secuestrada-gesell