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Baby Shark: De un video de 90 segundos a un imperio de US$400 millones

¡El Éxito Global de Baby Shark: De Canción Infantil a Empresa Millonaria!

La pegajosa canción "Baby Shark" ha catapultado a la compañía Pinkfong a la fama internacional, convirtiendo a un sencillo vídeo en un fenómeno con más de 16.000 millones de reproducciones en YouTube. Ahora, la empresa busca expandir su imperio en el mercado infantil.

Cuando Kim Min-seok decidió lanzar un pequeño fragmento de una canción infantil en 2016, nunca imaginó el impacto monumental que tendría.

El vídeo de «Baby Shark» ha logrado convertirse en el más visto de la historia, revolucionando el mundo del entretenimiento para niños.

El Ascenso de Pinkfong

Desde su creación en 2010 bajo el nombre SmartStudy, Pinkfong se dedicaba a desarrollar contenido digital para niños. Su infraestructura era mínima, con solo tres empleados y una oficina diminuta. Al respecto, Kim recordó que «ni siquiera esperábamos un salario» en aquellos tiempos.

Un Cambio de Suerte

La compañía, que ha cambiado su nombre a The Pinkfong Company, creció rápidamente, principalmente tras la popularidad de «Baby Shark». Actualmente, cuenta con cerca de 340 empleados y oficinas en importantes ciudades como Tokio, Shanghái y Los Ángeles. El 18 de noviembre de 2025, Pinkfong se hizo pública en la Bolsa de Corea, con una valoración que superó los 400 millones de dólares, alzando sus acciones más del 9% en su debut.

¿Por qué «Baby Shark» es tan Atractiva?

La melodía de «Baby Shark» es una adaptación de una antigua canción de campamento infantil estadounidense, popular desde la década de los 70. Kevin Chew, analista de medios, menciona que «su simplicidad atrae a los niños aunque pueda resultar agotadora para los adultos». Kim describe la canción como “rápida, rítmica y adictiva”, comparable a las melodías del K-pop.

Un Momento Viral

No fue un éxito inmediato; la canción comenzó a ganar popularidad cuando se viralizó en redes sociales y eventos infantiles, desatando millones de vídeos de niños y adultos disfrutando en familia. En noviembre de 2020, «Baby Shark» alcanzó el título de vídeo más visto en YouTube.

Más Allá de Baby Shark

A pesar de su inmensa popularidad, Kim Min-seok ha enfatizado que Pinkfong apunta a diversificar su contenido, tratando de crear nuevas franquicias como Bebefinn y Sealook, que ya demuestran un crecimiento significativo y ahora representan el 40% de las ganancias de la empresa.

Desafíos por Delante

Sin embargo, Pinkfong enfrenta la presión de demostrar que su éxito no se limita a «Baby Shark». Una demanda en 2019 que alegaba plagio fue desestimada, pues la empresa argumentó que su versión se debía a una canción de dominio público, lo que solidificó su posición en el mercado.

El Futuro de Pinkfong

Tras recaudar casi 52 millones de dólares en su salida a bolsa, la compañía busca invertir en la expansión de su catálogo y en el desarrollo tecnológico de su contenido. Con los niños como su principal audiencia, Kim está convencido de que Pinkfong puede seguir creciendo y evolucionando. “Hemos logrado lo que muchos creadores sueñan, pero ahora debemos garantizarle a los inversores que no es un éxito efímero,” concluyó Min-seok.

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