La mayoría de nosotros hemos necesitado o vamos necesitar los servicios de un abogado, pero hay ciertos aspectos a tener en cuenta.
Son muchas las leyes, decretos y sentencias que se promulgan cada año y algunas de ellas, de una u otra manera, nos afectan, por eso hay que saber escoger el tipo de abogado que necesitamos. Aunque un abogado suele tener conocimientos sobre todo el área legal, no todos pueden llevar a buen término todos los casos, y esto no significa que sea un mal abogado, sólo quiere decir que él se desempeña mejor en un área que en otra.
Tipos de abogados
Abogado Laboralista. Este tipo de abogado se especializa en todas las relaciones laborales. Se encarga de establecer las cláusulas de un contrato laboral, defiende tanto a empleados como a empleadores y explica la forma en la que se debe aplicar la ley laboral.
Abogado Penalista. En este caso el abogado se encarga de la defensa de su cliente cuando se le acusa de haber cometido algún acto delictivo. También defiende y procura obtener un beneficio cuando la parte afectada empieza un pleito penal.
Es una de las ramas de derecho más complicadas de llevar a cabo, ya que la ley penal es bastante extensa y sus interpretaciones son muchas. Si necesitas un abogado penalista o no sabes qué tipo de abogado necesitas, en abogadosweb.org puedes encontrar un asesor que te oriente sobre el tipo de representación legal que necesitas.
Abogado Civilista. Los abogados que se especializan en el derecho civil se encargan de los casos en que el perjuicio tiene que ver con los beneficios, que como particulares creemos que merecemos. Es decir, los casos de divorcios, préstamos y deudas suelen ser atendidos por este tipo de abogado. Cuando necesitamos asesoría en cuento a nuestros derechos civiles, este tipo de abogado es el encargado de ello.
El tipo de pleitos en esta área suelen llevarse a cabo en juzgados de primera instancia. Esto quiere decir que el abogado debe saber llevar a cabo una conciliación entre las partes enfrentadas y encontrar un punto medio justo para cada litigante.
Abogado de Familia. Cada vez son más los divorcios que se firman, y muchas de estas parejas que ponen fin a su relación tienen hijos en común. En este caso, el abogado se encargará de defender los derechos de los hijos y procurará el mayor bienestar posible para él en medio de este proceso que puede ser muy traumático.
La regularidad de las visitas, la manutención económica, las vacaciones de los niños y la custodia son aspecto en los que este tipo de abogado puede ayudar a su defendido. Claro que aunque represente al padre, a la madre o algún otro familiar, siempre tendrá en cuenta el mayor bienestar de los niños.
Abogados Mercantiles. Se dedican al vasto mundo de las empresas, compañías y sociedades. Los contratos y registros de alguna actividad mercantil son su especialidad. Cuando se incursiona en el mundo empresarial, los procedimientos para llevar a legalidad esta labor son muchos y muy complicados. El tipo de actividad que desarrollará la empresa determina los pasos a seguir para su registro, por eso un muy importante que el abogado conozca bien la legislación en este sentido.
Antes de contratar un abogado
A la hora de contratar los servicios de algún abogado, recuerda que aunque tengan un conocimiento general, la especialización es muy importante. Un abogado capacitado con los conocimientos y la experiencia en el caso concreto en el que se necesita la defensa tiene más probabilidades de éxito que uno que no conoce bien el tema a tratar.
Recuerda también que el ejercicio de la abogacía debe ser llevado a cabo por alguien con los estudios y los conocimientos para ellos. Hay muchos que se hacen pasar por abogados con certificados de prácticas fraudulentos y por medio de ello engañan a muchos, por eso es mejor pedir el número de certificado y corroborar ante el Colegio de Abogados que sea real.