En un petitorio que circula entre los miembros de la fuerza de seguridad de la Provincia de Buenos Aires, se pueden leer los puntos que reclaman:
En primer lugar, exigen que no haya represarías a quienes se unan a la protesta. Detrás de ese pedido, se encuentra el deseo de conformar o oficializar un sindicato para los policías. El derecho a la sindicalización es uno de los puntos del petitorio.
En segundo lugar piden un aumento del 56 y 64 por ciento, dependiendo los escalafones y los básicos de cada jerarquía.
También buscan un incremento de las horas adicionales que hacen los uniformados para poder tener un poco más de dinero a fin de mes. Y solicitan que sean abonadas en tiempo y forma esas horas, algo que, aseguran, no estaría sucediendo.
Al mismo tiempo piden equipos de trabajo e uniforme, patrulleros en condiciones, capacitación permanente, derecho a la vivienda digna y la no obligatoriedad de adherirse I.O.M.A, la obra social de los trabajadores del Estado provincial.
También solicitan asistencia psicológica y exigen que se terminen “las represalias”: sumarios, arrestos, desafectaciones y traslados como medidas de disciplinamiento.
Se trata del segundo día de protestas se desarrollaron luego del anuncio del presidente del Plan de Fortalecimiento de Seguridad en la Provincia de Buenos Aires, que hizo el presidente Alberto Fernández, desde la Quinta de Olivos.
La iniciativa contará con una inversión de más de 10.000 millones de pesos y llegó tras el reclamo de intendentes ante la suba de los robos y la violencia en el conurbano.