Luego del accidente, el alemán Michael Schumacher se encuentra en su mansión, en Suiza, y pese a los intentos de la familia por mantener el hermetismo, la prensa ha logrado tener acceso a algunos detalles que no son para nada alentadores.
«Para angustia de familiares y amigos, no hay ninguna garantía de que Michael Schumacher vuelva a la normalidad», son las palabras con la que comienza la nota publicada sobre el tema por el «Daily Express”.
Según la publicación, un allegado a la familia Schumacher declaró que «el progreso es muy lento. No hay milagro en el horizonte». En su casa a orillas del lago de Ginebra, Michael es tratado por un equipo médico de 15 personas durante las 24 horas del día.
La familia lleva gastados 10 millones de libras (13,5 millones de euros) en su recuperación y se supo que ya despertó del coma, pero las noticias sobre su estado actual son muy escasas. «Lo que tortura a la opinión pública es lo mismo que preocupa a la familia, que es un proceso muy lento y el progreso es incierto», afirmó Peter Hamlyn, especialista en neurología y en el campo de las lesiones en la cabeza. (Especial El Intransigente)
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