Denunciaron nuevos ataques con burundanga

L os casos de ataques con burundanga en la Ciudad de Buenos Aires no se detienen y cada vez provocan mayor conmoción. Semanas atrás, varias mujeres denunciaron hechos registrados en una plaza del barrio de Recoleta, pero en los últimos días se sumaron episodios dramáticos en otras zonas, como Chacarita, Palermo y Barrio Norte. Entre los denunciantes aparece el actor Federico D’Elía, un médico obstetra cuya esposa está embarazada resultó victimizada cuando se trasladaba en un taxi y un abogado que llevaba a su hijo al jardín. Desde la Comuna 2, las autoridades pidieron a la población que se acerque a denunciar a las comisarías cuando sufran estos ataques, o se dirijan a la sede ubicada en la calle Uriburu 1022.

Asimismo, se indicó que pidieron al Ministerio Público Fiscal que inicie una causa donde confluyan todas las denuncias que se conocen hasta el momento. En torno a los nuevos casos, el actor

Federico D’Elía, protagonista de la serie «Los Simuladores», explicó en la red social Twitter que «el viernes por el barrio de Chacarita a una persona muy conocida mía se le acercó una viejita y le dio un papel con ‘la palabra de Dios'», agregando que «en la zona hay muchos evangelistas (no sé sí lo era o era trucha, creo más lo segundo) no conforme con habérselo entregado la persiguió unas cuadras diciéndole, insistentemente, que lea algunas palabras cosa que está persona hizo y como llegaba su colectivo corrió y se subió».

«Desde ese momento empezó a sentirse un tanto boleada, luego tomó un tren y el viaje de una hora y media se le hizo de cinco minutos, y así siguió. Moraleja: no abran ningún papel que les den en la calle, dicen que la idea es que caiga y después aparece gente más joven que te afana todo», dijo el famoso actor.

Otro denunciante es Federico Nolting, un médico obstetra a cuya esposa, embarazada de seis meses, aparentemente la drogaron con burundanga el miércoles cuando viajaba a bordo de un taxi por el barrio de Palermo. «Serían las 22.30, yo estaba comiendo con unos amigos, y me llamó mi esposa con voz temblorosa, desesperada. Se había tomado un taxi en la esquina de Billinghurst y Güemes. El chofer le ofreció la tarjeta de la empresa. Ella venía con mi hijo de tres años a upa. Agarró la tarjeta sin darse cuenta», contó el facultativo, en declaraciones a Canal 9. «A los pocos minutos comenzó a sentirse muy mal. Se le durmieron las manos, y sentía picazón en la garganta y la boca, todo el proceso acompañado con un frío terrible. En un momento, el taxi se detuvo en un semáforo, y ella se bajó del vehículo como pudo, llegando a Las Heras. La ayudaron unos jóvenes que la vieron mal. De hecho, fueron ellos quienes me llamaron por teléfono», dijo Nolting.
El médico relató que «la vi recién a los 15 minutos, y estaba en muy mal estado, incluso la tuvo que atender el SAME, luego hicimos la denuncia policial», precisando que «mi esposa tuvo mareos como todo el mundo, pero nunca un cuadro como éste, por eso nos parece que se debe conocer el caso». «Recorrimos toda la zona buscando el papel, pero no lo pudimos encontrar. Un anestesista me contó que le había pasado lo mismo a gente conocida», dijo Nolting. Finalmente, un abogado reveló que llevando a su hijo al jardín de infantes, a las 8.50 de la mañana, una chica bien vestida se le acercó en la calle Arenales, esquina Paraná, y le ofreció un cartón. Tras el contacto, el letrado se descompuso. «Comencé a sentirme mal. Salí corriendo con el nene, no quería desvanecerme ahí», expresó la víctima.

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