Un equipo de científicos del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) ha descubierto mediante un estudio con ratones, la causa de un tercio de las muertes de enfermos de cáncer: la caquexia, un síndrome que causa extrema delgadez y también debilidad.
Al estudiar vías de ataque indirecto al cáncer en el resto del organismo, los investigadores descubrieron que el proceso por el que se convierte el tejido graso blanco (la grasa “mala”, que almacena energía) en marrón (la grasa “buena”, que se quema para producir calor), es la causa de la muerte del 30% de los pacientes de cáncer.
“Es la primera vez que este fenómeno que podríamos llamar ‘quemagrasa’ se asocia a un efecto negativo; tiene potenciales efectos positivos contra la obesidad y la diabetes pero también consecuencias muy perniciosas en el contexto del cáncer”, afirma Michele Petruzzelli, líder del estudio.
El resultado del estudio, que ha sido publicado en la revista Cell Metabolism, sugiere que los antiinflamatorios podrían ayudar a combatir la caquexia y “permite pensar en la posibilidad de identificar biomarcadores que nos ayuden a predecir qué pacientes van a desarrollar caquexia, de forma que podamos tratarles de forma preventiva”, aclara Petruzzelli.