El mercado está observando con atención la dirección que tomará el gobierno argentino frente a un escenario de vencimientos de deuda que promete ser desafiante. La necesidad de mantener tasas reales positivas y refinanciar sin recurrir a la asistencia del Banco Central se ha vuelto prioridad, pero el calendario financiero de 2026, con pagos billonarios, podría poner a prueba la sostenibilidad del programa económico.

Los mercados comienzan a estabilizarse y se observa una leve recuperación en el valor del bitcoin.

Vencimientos billonarios en el horizonte

Según cálculos previos, el primer semestre de 2026 presenta el mayor volumen de vencimientos en pesos, superando varios billones de moneda nacional cada trimestre. A pesar de que el Ministerio de Economía ya ha iniciado algunas reestructuraciones selectivas, las consultoras enfatizan que el reto es de alta complejidad.

El primer gran vencimiento ser realiza el 9 de enero, con un pago aproximado de 4.300 millones de dólares ligado a los cupones de bonos reestructurados por el exministro Martín Guzmán. Este monto es parte de una reestructuración que en 2020 incluyó renegociaciones por 66 mil millones de dólares. Posteriormente, el 9 de julio, se presentará otro vencimiento significativo por 4.200 millones de dólares, sumando un total de 18 mil millones de dólares en compromisos por parte del actual ministro Luis Caputo.

Desafíos económicos y acumulación de reservas

El economista Leo Anzalone subraya la dificultad del calendario de vencimientos, afirmando que resulta casi imposible afrontarlo sin algún tipo de financiamiento adicional. Actualmente, Argentina se enfrenta a reservas netas negativas, lo que significa que cada pago en dólares no solo reduce el margen de maniobra, sino que agrava la vulnerabilidad económica.

Estrategia del gobierno para lograr estabilidad

Si bien el gobierno ha propuesto emitir un bono en dólares para extender los plazos de vencimiento de deuda, todavía no ha conseguido acceso a los mercados internacionales. La acumulación de reservas se ha convertido en un objetivo prioritario, situación que requiere señales claras de sostenibilidad fiscal para tranquilizar a los inversores.

A pesar de esos retos, se inició un diálogo sobre cómo fortalecer la acumulación de reservas, que el ministro Caputo considera esencial para el éxito económico. Sin embargo, el proceso de compra de divisas se ha vuelto complejo, con la última declaración reconociendo que el país ha priorizado los pagos de deuda sobre la acumulación real de reservas.

Impacto de un entorno económico volátil

Desde LCG señalan que la elevada concentración de vencimientos implica que el Tesoro debe mantener tasas competitivas, lo que a su vez incrementa el costo del financiamiento. Esto presenta un equilibrio delicado que limita las posibilidades de bajar las tasas de interés que necesita la economía.

Por otro lado, consultoras coinciden en que el mercado está atento a tres factores clave: la viabilidad fiscal para 2026, la estrategia de manejo de pasivos, y el marco monetario y cambiario, que influye directamente en la preferencia por instrumentos en pesos.

Las perspectivas de los analistas subrayan que cada licitación de deuda podría convertirse en una prueba crucial para la credibilidad del gobierno, el cual debe demostrar un compromiso claro y continuo para evitar sobresaltos en el mercado.

La voz del FMI sobre la situación actual

La portavoz del Fondo Monetario Internacional (FMI), Julie Kozak, enfatizó la importancia de un marco monetario coherente y subrayó que el cumplimiento de las metas de reservas es fundamental para la estabilidad económica. Kozak instó al gobierno argentino a capitalizar la ventana de oportunidad actual mediante políticas adecuadas que permitan la acumulación de reservas.