El teniente coronel Hugo Chávez quiere militarizar a Venezuela. Lo dicen sus adversarios políticos que critican los planes del mandatario de designar a sus compañeros de armas, en su gran mayoría, como candidatos para las elecciones regionales que tendrán lugar en diciembre de este año luego de las presidenciales del 7 de octubre.
ABC de España/Ludmila Vinogradoff / Corresponsal en Caracas
Esta semana el presidente Chávez ha designado a dedo a 10 aspirantes de los 23 estados federales, que son 2 civiles y 8 militares, a pesar del recelo que ha despertado su decisión tanto en las filas del chavismo como de la oposición por la supremacía militar que tendría la administración regional en un eventual triunfo chavista.
De los 10 candidatos designados por Chávez, dos son civiles: el ministro del Interior y Justicia, Tareck El Aissami para la gobernación del Táchira y el vicepresidente Elías Jaua para la gobernación de Miranda. Los 8 militares: Francisco Ameliach para Carabobo, el general Carlos Mata para la Isla de Margarita, Francisco Arias Cárdenas para el Zulia, Diosdado Cabello posiblemente para Monagas, Rafael Isea para Aragua, Francisco Rangel Gómez para Bolívar, Luis Reyes Reyes para Lara y Jorge García Carneiro para Vargas.
El subsecretario general del Movimiento al Socialista, antes aliado chavista, Gustavo Mujica, dijo que mientras Chávez prohíbe el uso de la gorra tricolor «pretende imponer la cachucha militar a las gobernaciones con lo que plantea un claro regreso a la Venezuela militarista».
Dijo que Chávez deja al descubierto que su intención es la de gobernar de manera centralizada, autoritaria y inconsulta con los civiles. Mujica resaltó que con el triunfo del candidato opositor Henrique Capriles Radonski «Venezuela debe volver a la civilidad y la confianza en las instituciones. Los militares deben volver a los cuarteles».