El gobierno conservador anunciará el próximo 27 de septiembre nuevas reformas destinadas a garantizar el cumplimiento de los objetivos de déficit de España, según comunicó hoy a sus socios del Eurogrupo el ministro de Economía, Luis de Guindos. Volvió a negar un rescate.
El «plan nacional de reformas para impulsar el crecimiento y la competitividad de la economía española» anunciado hoy por Luis de Guindos, el ministro de Economía, tendrá un calendario concreto y será presentado junto con los presupuestos para 2013, el próximo 27 de septiembre.
España «ha anunciado su intención de presentar programas antes de final de mes de reformas estructurales», manifestó en una rueda de prensa en la capital de Chipre el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker.
El gobierno español «está decidido a adoptar las medidas necesarias si no se cumplen los objetivos de déficit», añadió el luxemburgués, que habló de medidas adicionales si se viera que no pueden llegar a cumplir los objetivos de déficit.
España tiene que terminar este año con un déficit público del 6,3 por ciento del PIB, según marca el compromiso adquirido por el gobierno de Rajoy con la Unión Europea (UE), que flexibilizó una meta que inicialmente estaba fijada en el 5,3 por ciento.
El Ejecutivo tiene además que presentar antes de que termine septiembre los presupuestos públicos para 2013, año en el que debe rebajar el déficit público hasta el 4,5 por ciento del PIB.
A su llegada a la reunión del Eurogrupo en Nicosia, Guindos avanzó ya por la mañana que el gobierno español haría «anuncios importantes en los próximos días».
Juncker indicó que las medidas adicionales que aplique España serán decididas por el gobierno de Rajoy. «No somos nosotros quienes tienen que decir a España qué medidas tiene que adoptar», señaló el presidente del Eurogrupo.
En espera del anuncio de esas medidas, lo que el gobierno de Rajoy tampoco ha aclarado hasta el momento es si pedirá finalmente o no a sus socios en la moneda única la compra de deuda española por parte del Banco Central Europeo (BCE).
En ese sentido, De Guindos negó hoy que el próximo plan de reformas esté relacionado con las especulaciones sobre una posible petición de rescate por parte de Madrid. Ambos asuntos «no guardan relación», aseguró.
«Es mucho más importante cumplir los objetivos del déficit público de España y cumplir con lo que es el programa de reformas que un potencial rescate o no rescate, como lo quieran denominar», había apuntado De Guindos a primera hora en Nicosia.
«Lo que tiene que hacer España es ajustar su déficit público a la senda comprometida, que es la que ya tenemos en el procedimiento por déficit excesivo, y después en lo que son las reformas económicas del semestre europeo», insistió el titular de Economía español.
El gobierno de Mariano Rajoy está analizando, según ha dicho el propio jefe del ejecutivo, si pide que el BCE compre de deuda de España, que en los últimos meses está viendo muy dificultada su financiación por el acoso de los mercados.
Lo importante es que se vayan estableciendo «los elementos de lo que podrían ser las condiciones que ha ido proponiendo el BCE para la intervención en el mercado secundario». «De eso vamos a hablar ahora de forma genérica, pero en absoluto relacionado con España», manifestó el ministro, que tuvo que ausentarse un rato de la reunión con sus colegas del Eurogrupo por tener fiebre.
La nueva petición de ayuda de España, si se produce, llegaría después de la que ya hizo en junio para su sistema bancario. El Eurogrupo ha comprometido hasta 100.000 millones de euros para el rescate de los bancos en los que el estallido de la burbuja inmobiliaria ha dejado agujeros millonarios.
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