Axel Kicillof advirtió que «la convertibilidad era la que generaba un verdadero cepo cambiario porque regalaba dólares» y esa situación obligaba al Estado a «endeudarse para cambiar un peso por un dólar»
«La década del ´90 fue la de mayor fuga de capitales», aseguró
el secretario de Política Económica al exponer el proyecto de Presupuesto 2013 ante los legisladores que integran la Comisión de Presupuesto del Senado.
«Cuando detonó esa bomba se acabaron los pesos y las economías provinciales se vieron obligadas a pagar sus cuentas», agregó el funcionario, que estuvo acompañado por los secretarios de Hacienda, Juan Carlos Pezoa, y de Finanzas, Adrián Cosentino.
Kicillof afirmó que Argentina atraviesa «un proceso de reindustrialización y de reversión del ciclo neoliberal» y que ese «cambio estructural» aún no está terminado y requiere de «un período muy extenso para ser profundizado».
El secretario de Política Económica criticó además a las calificadoras de riesgo y a los economistas «faranduleros» a los que «les molesta» que Argentina «no haya aplicado sus recetas» de corte ortodoxo.
Dijo que estos últimos quieren que al país le vaya mal porque les representa «una excelente oportunidad para hacer negocios».
«Sus profecías horripilantes no se están cumpliendo», sostuvo el funcionario ante los senadores de la comisión de Presupuesto, que preside el senador Aníbal Fernández.
Respecto de la crisis económica mundial, admitió que «evidentemente afecta a la Argentina», aunque pronosticó que el año entrante habrá «un alivio, ya que se registrará» una leve recuperación a nivel mundial, «en particular de la economía brasileña».