El video, de unos 30 segundos, muestra a una joven, llamada Carissa, que –incentivada por su amigo- saca la cabeza por la ventanilla del vagón cuando el tren viaja a gran velocidad.
Carissa, lleva puesto sus anteojos de Sol, se asoma por la ventanilla y posa para la cámara mirando hacia atrás y sin fijarse que a muy poca distancia se aproxima otro tren por la vía contraria.
Solo unos pocas decimas de segundo antes de que el tren llegue a su vagón, la joven salta hacia dentro cayendo al piso, gritando “Oh, Dios mio!”.