La Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) mantendrá su estrategia de apelar hasta la última instancia los fallos en favor de los jubilados que se presenten a la Justicia para que se recalculen los haberes que perciben.
«Todos los abogados del Estado tienen la obligación de apelar y es lógico. Es una forma de resguardar el patrimonio público y evitar la corrupción. Si el Estado dejara pasar las cosas, sería una locura», argumentó el titular del organismo, Diego Bossio.
Esta estrategia, explicó en una entrevista con Página 12, es «una forma de evitar abusos». «Si no, la simple connivencia entre un abogado y un empleado de la Anses haría estragos. Hay un caso reciente en el organismo que tuvimos que echar a un empleado porque dejaba correr los tiempos procesales. No contestó veinte demandas, doce de un mismo abogado», alegó.
Si bien la semana pasada había aclarado que cumplirían con el fallo de la Corte Suprema y dejaría de recusar magistrados, Bossio no se guardó sus críticas: «Hay muchos jueces que tienen vocación legislativa. Pero no es su función. Si quieren legislar, si quieren gobernar, que se presenten a elecciones».
Sus declaraciones van en línea con los recientes cuestionamientos del kirchnerismo hacia los distintos tribunales, en un mes en que recibieran fallos adversos en las causas por la Ley de Medios, jubilaciones y acceso a la información pública.
De todos modos, el funcionario del gobierno nacional aclaró que «la Anses cumple el pago de sentencias y lo va a seguir haciendo». «Hay voluntad y capacidad para hacer frente a las sentencias», señaló.
También aprovechó la ocasión para desmentir que el aumento semestral que correspondía a los jubilados haya sido menor a lo anunciado: «Usamos los índices definitorios, no provisorios, y eso contestamos a todos los que nos pidieron informes».
Por último, Bossio recordó que el dinero de la Anses no es «la plata de los jubilados», sino «la plata de los trabajadores y del conjunto de los argentinos que financian a la seguridad social» con «la recaudación de impuestos nacionales» como el IVA, Ganancias y los gravámenes a cigarrillos y combustibles.
«Los trabajadores informales y los desocupados también aportan a la seguridad social de ese modo», concluyó, en referencia a la jubilación que cobran aquellas personas que no realizaron contribuciones formales al sistema previsional durante su vida laboral activa.
fuente > infobae.com