El equipo argentino que participó en la competencia mundial de biología sintética iGEM, realizada en Boston, fue premiado por su proyecto.
En su primera participación en la competencia mundial de biología sintética iGEM, el equipo argentino obtuvo una medalla de bronce por su proyecto. En el certamen compitieron 190 equipos de 34 países.
El equipo argentino estuvo compuesto por: los estudiantes Alejandra Parreño (biología); Manuel Jiménez (computación); Mario Rugiero (química); Verónica Parrasco (física) y Luciano Morosi (biología). Los biólogos Alan Bush, Alicia Grande y Germán Sabio, a cargo de la supervisión, y Alejandro Nadra e Ignacio Sánchez como instructores.
“El mayor reconocimiento fue haber llegado a la final. De casi 200 equipos en el mundo, sólo 60 lo lograron y de ellos, sólo cinco éramos de Latinoamérica. Nos sorprendió muchísimo todo lo que pudimos hacer en un tiempo bastante acotado. Es notable lo que se puede hacer trabajando en equipo”, afirmó Bush. Por su parte, Nadra sostuvo: “En febrero empezamos a discutir ideas, en marzo nos anotamos en el certamen, y el trabajo experimental fuerte fueron dos meses, en especial en las vacaciones de invierno”. Asimismo, Sánchéz relató que el proyecto presentado “se llamó Ecología Sintética Sintonizable”, con el cual se intentó domesticar levaduras para que cooperaran entre sí e hicieran lo que les ordenaban.